La Reina transmite sus condolencias a Jaime de Marichalar por la muerte de su madre

Doña Sofía, que mantenía una cercana relación con la condesa viuda de Ripalda, permaneció en el domicilio familiar de los Marichalar alrededor de media hora

por hola.com

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La Reina acudió ayer por la tarde al domicilio de la familia Marichalar en Madrid para transmitir sus condolencias por el fallecimiento de la condesa viuda de Ripalda, María Concepción Sáenz de Tejada, madre de Jaime de Marichalar, que falleció el jueves por la noche en Madrid a los 85 años. Doña Sofía llegó pasadas las 18.30 horas y entró en un vehículo a la urbanización de La Moraleja, donde se dirigió a la residencia de los Marichalar para dar el pésame a la familia. La visita duró una media hora y, tras ella, la Reina abandonó el lugar en un vehículo acompañada por Rafael Spottorno, jefe de la Casa del Rey, en presencia de un nutrido grupo de periodistas.


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Doña Sofía ha estado al lado de la familia Marichalar en estos tristes momentos. La Reina siempre ha mantenido una relación cercana con la condesa viuda de Ripalda como abuela de Felipe y Victoria, los dos hijos que tuvo doña Elena durante su matrimonio con Jaime de Marichalar, por eso nada más conocer su ingreso en el hospital madrileño de La Paz acudió a visitarla. 

La madre de Jaime de Marichalar nació hace 85 años en Logroño. El 25 de julio de 1957 contrajo matrimonio con el conde de Ripalda, Amalio de Marichalar y Bruguera, en el municipio riojano de Torrecilla en Cameros. El matrimonio tuvo seis hijos: Amalio Joaquín, Ana, Álvaro, Jaime, Luis María e Ignacio. El 26 de diciembre de 1978 falleció el conde de Ripalda en Madrid y desde entonces todos los años su familia le ha recordado en esa fecha con un funeral celebrado en Soria.

Siempre discreta, las últimas imagenes de la condesa viuda de Ripalda pertenecen a mayo de 2013 cuando asistió a la comunión de un familiar en Soria. En 2010, se mostraba radiante por la boda de su hijo Álvaro y Ekaterina; y un año antes asistió del brazo de su hijo Jaime a la comunión de su nieta Victoria Federica.