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Veintiún años después de la famosa imagen del príncipe de Asturias entrando en el estadio como abanderado de la delegación olímpica española que participaba en los Juegos de Barcelona, don Felipe ha vuelto a volcarse con el espíritu olímpico para lograr que Madrid sea sede de la competición mundial de 2020, pero esta vez, junto a su esposa, la princesa Letizia.
De la mano, regalándose numerosos gestos de complicidad y más felices que nunca, los príncipes de Asturias llegaron al Teatro Colón de Buenos Aires para asistir a la ceremonia inaugural de la 125 sesión del Comité Olímpico Internacional. Don Felipe y doña Letizia encabezaron la delegación española en la que participaron también, entre otros, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo; el presidente de la comunidad de Madrid, Ignacio González; y el baloncestista Pau Gasol.
A su llegada al teatro, los príncipes de Asturias coincidieron con el príncipe Alberto de Mónaco y se saludaron antes de ingresar al símbolo de la ópera porteña. La princesa, que recurrió a su fondo de armario para la ocasión, estaba radiante y no paró de saludar a todos los allí presentes con la mejor de sus sonrisas. Después de verla con un 'look' más desenfadado en sus primeros días por Buenos Aires, doña Letizia hizo gala de su elegancia con un bonito vestido azul noche de pedrería, zapatos de salón negros y cartera a juego.
En el interior del teatro, los asistentes escucharon las palabras de bienvenida del presidente del COI, el belga Jacques Rogge, y el alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, y después disfrutaron de un programa lírico de compositores argentinos. Los miembros de las tres delegaciones rivales estuvieron sentados en el mismo orden en el que presentarán sus proyectos ante los miembros del COI: en primera fila está la comitiva de Estambul, en la segunda la de Tokio y en la tercera la de Madrid.
Después de descansar y recargar pilas, llegó el gran día y, a las 17:30 horas de este sábado, comenzó la exposición de la candidatura de Madrid para organizar los Juegos de 2020. Los nervios estaban a flor de piel pero, ante todo, la ilusión y la esperanza de que el proyecto de la capital española convenciera a los miembros del COI. La intervención del Príncipe de Asturias causó verdadera sensación y fue, sin duda, un abanderado de lujo. Empezó su discurso en francés, siguió en español y finalizó en inglés. "Los beneficios del deporte se miden en generaciones, no en dólares", declaró don Felipe, quien recordó lo importante que fue para él su participación en Barcelona 92: "Cada año que pasa entiendo la suerte que tuve de despempeñar un papel en la historia olímpica".
En primera fila, emocionada y sin perder detalle de su intervención, se encontraba doña Letizia, que al igual que las demás mujeres de la expedición madrileña iba vestida toda de rojo. La princesa estaba radiante y con un brillo especial en los ojos, y es que todos los que han viajado a Buenos Aires no han perdido la esperanza y han confiado en que, tras tres intentos, Madrid iba a conseguir convertirse en la sede de las Olimpiadas del año 2020.
Una vez finalizada la exposición de la candidatura de la capital española, todos abandonaron el escenario. Eso sí, el príncipe no dudó en ir en busca de su mujer para darle un cariñoso beso, sin duda, su mayor 'regalo' después de haber realizado una presentación más que convincente.
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