La agenda del Rey recupera tono. Esta semana ha ganado corpulencia con tres audiencias y una cena en Zarzuela en honor al Presidente de la República de Uruguay, además del próximo homenaje a los caídos por el Día de las Fuerzas Armadas, un nuevo acto fuera de Palacio.
A las audiencias con el canciller de Austria, Werner Faymann, y el presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala, que le hizo entrega de la memoria del año 2012, se sumaba ayer su encuentro con el Presidente uruguayo. Apoyado en sus muletas y protegido de la lluvia bajo un paraguas, don Juan Carlos recibió a José Mujica a las puertas del Palacio de la Zarzuela y le dio una efusiva bienvenida con un abrazo. A continuación, ambos accedieron al interior del palacio y se dirigieron al despacho del Rey, donde mantuvieron una reunión acerca de temas políticos y económicos en la que participaron también el Ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Leonardo Almagro Lemes; el Ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación de España, José Manuel García-Margallo y Marfil, y los embajadores de España en Montevideo, Roberto Varela, y de Uruguay en Madrid, Carlos Bustillo.
Tras este encuentro, tuvo lugar la cena ofrecida por los Reyes y los Príncipes de Asturias en honor al mandatario de Uruguay en el Salón de Audiencia, habilitado para la ocasión como un comedor para unos cincuenta invitados de ambos países. Durante su discurso, el Rey subrayó la buena relación bilateral y destacó la presencia de muchas empresas españolas que invierten en el país iberoamericano. Además, añadió, que pese a la crisis económica y financiera, España sigue siendo uno de los mayores inversores del mundo. Acabó recordando la visita que Sus Majestades realizaron a Uruguay hace tres décadas.