A diferencia del sábado, que don Juan Carlos no recibió visitas para centrarse en su recuperación, a primera hora de la tarde de este domingo comenzaban a llegar los miembros de la familia real al hospital Quirón San José de Madrid para interesarse por su evolución tras la operación de la cadera izquierda a la que se sometió el viernes. La Reina, acompañada de los Duques de Palma, que fueron con su hijo mayor, Juan, y de la infanta Elena, llegaban en el mismo coche conducido por Iñaki Urdangarin sobre las 15:30 horas.
Se trata de la primera vez que vemos reunirse públicamente al Duque de Palma con el Rey después de que se hiciera pública su implicación en el caso Noos. Una imagen muy significativa que no se producía desde el 12 de octubre del año pasado, cuando vimos por última vez a toda la Familia Real reunida. Urdangarin, para el que el fiscal ha pedido una fianza de 8,1 millones de euros junto a su exsocio en el instituto, Diego Torres, presentaba un aspecto muy desmejorado y al entrar al hospital ha permanecido en todo momento cabizbajo y sin articular palabra, además de ser el último miembro de la familia que ha entrado en el centro clínico, por detrás de su mujer, la infanta Cristina.
Minutos después llegaban los Príncipes de Asturias acompañados de sus hijas, las infantas Leonor y Sofía, que una vez más se han convertido en el centro de atención y han acaparado todas las miradas y flashes de los fotógrafos. Aunque han coincidido en las horas en las que han acudido al hospital, no se sabe si don Felipe y doña Letizia se han visto o no con el resto de la familia. De hecho, tras visitar al monarca, los Príncipes de Asturias y sus hijas abandonaron el centro minutos después que la Reina, la infanta Elena y los Duques de Palma, evitando así que los medios pudieran captar una imagen de todos juntos. A su salida, don Felipe ha asegurado que el Rey estaba "muy bien, con muy buen aspecto y va todo fenomenal". A la pregunta sobre si su operación los había unido a toda la familia, respondió: "Sí, hemos estado todos con él y eso le ha animado mucho".
El monarca también ha recibido este domingo la visita del Presidente del Gobierno, que llegó al hospital Quirón San José de Madrid poco antes de las 13:30 horas. Mariano Rajoy fue recibido por el jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, y saludó a los periodistas con un "buenos días" antes de acceder al edificio sin realizar declaraciones. Una hora después, Rajoy abandonaba el hospital y atendió brevemente a los medios allí congregados. "Estaba sentado, le he visto muy animado y me ha dicho que ha desayunado dos huevos fritos; yo creo que eso es demostración inequívoca de que está bien", subrayó en unas breves declaraciones a los periodistas en la puerta del hospital madrileño.
"Le he encontrado bien y animado y estamos todos muy contentos", ha insistido el jefe del Ejecutivo, y ha puntualizado que no ha hablado con él de las elecciones autonómicas catalanas: "Hemos hablado de medicina y de la vida misma, pero sobre todo de que se encuentra muy bien y de que a partir de ahora va a empezar a caminar y dar paseos y a intentar recuperarse lo más rápidamente posible".
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