Los Príncipes de Asturias afrontaron el jueves su primera jornada de audiencias y eventos enmarcados en la entrega de los premios que anualmente se entregan en el teatro Campoamor de Oviedo. A una mañana y una tarde repleta de encuentros y de cariñosos gestos de los asturianos, don Felipe y doña Letizia remataron el día asistiendo al concierto de la Orquesta Sinfónica del Principado. Una tradición que este año ha contado con la novedad de tener como director al maestro Rossen Milanov, que ha unido además a los tres coros de la Fundación: el de adultos, el juvenil y el infantil.
Interpretaron Las divertidas aventuras de Till Eulenspiegel, op. 28, de Richard Strauss, y El canto de los bosques, op. 81, de Dmitri Shostakovich. Juntos a ellos actuaron como solistas Sergey Romanovsky (tenor) y Alexander Vinogradov (bajo). En total sumaron 185 voces: 70 infantiles, 35 juveniles y 80 voces adultas. Veteranos y niños se unieron en una foto de familia en la que doña Letizia volvió a mostrar su debilidad por los más pequeños, algunos más atentos a ella que a la cámara, que recibieron sus atenciones y cariñosas caricias. La Princesa escogió conjunto con falda bordada en oro bronce y plata y jersey cachemire negro, de Felipe Varela. Finalizado el recital, asistieron a una cena con los patronos de la Fundación Príncipe y representantes institucionales, en la plaza de Trascorrales.
Hoy viernes 26 les espera también un día importante. Por la mañana recibirán a los premiados y por la tarde presidirán la entrega de estos galardones en una ceremonia que congregará a decenas de invitados. Este año, entre otros nombres, estarán Rafael Moneo, premio de las Artes, Iker Casillas y Xavi, premio de Deporte, la filósofa estadounidense Martha Nussbaum, premio de Ciencias Sociales, y el japonés Shigueru Miyamoto, creador de Super Mario. El sábado 27 visitarán el elegido como pueblo ejemplar, un honor que este año ha recaído en Bueño, en el concejo de Ribera de Arriba, a 7 kilómetros de Oviedo.
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