Doña Cristina se encuentra en Madrid. Llegó esta mañana a la capital española después de haber pasado 48 horas en Barcelona para cumplir con sus compromisos profesionales en la Fundación de La Caixa. Todo apunta a que la presencia de la infanta en la capital obedece a su intención de aprovechar su viaje laboral a España para visitar a los reyes a los que no ve desde hace tiempo. El último encuentro se produjo a finales de noviembre cuando la reina Sofía visitó a los Urdangarín en Washington. Desde entonces no hay constancia de otras reuniones familiares, ni tan siquiera en las Navidades como era costumbre. Lo más probable es que después de casi cuatro meses sin verse la infanta no desaprovechará la oportunidad de pasar por palacio, aunque su visita a La Zarzuela no ha sido confirmada oficialmente, ya que la Casa Real no informa de la vida privada de la familia real.
La infanta Cristina ha regresado a España por primera vez desde que estallara el caso Urdangarín y su marido fuera imputado por su implicación en la operación Babel. Llegaba el pasado martes a Barcelona, una semana después de que él hiciera una breve visita a la capital catalana, para cumplir con sus obligaciones laborales y realizar varias gestiones personales. El propio Urdangarín viajó hasta la Ciudad Condal para empezar a preparar junto a su abogado, Mario Pascual Vives, su defensa ante su imputación. El duque de Palma deberá declarar el próximo 25 de febrero en los juzgados de Palma de Mallorca sobre el supuesto desvío de fondos públicos del Gobierno balear y de la Comunidad Valenciana al Instituto Nóos, que él presidía. También la infanta Cristina se ha reunido con el abogado de su marido, que ha visto a la infanta "preocupada, como es lógico" en una entrevista "de cortesía" para "recabar algunos datos".
Mientras Iñaki Urdangarín ha evitado en las últimas semanas que los reporteros gráficos le fotografiasen, la hija menor de los reyes ha dado la cara en su visita a España. Recorrió ayer, de hecho, los últimos metros en dirección a la sede de la Fundación La Caixa, donde trabaja, andando y dejándose fotografiar e incluso sonriendo a los medios de comunicación presentes.