Los príncipes de Asturias consuelan a los familiares de las víctimas del terremoto en Lorca
Don Felipe y doña Letizia han presidido los funerales de Estado para cuatro de las víctimas, puesto que las cinco restantes han preferido una ceremonia íntima, pero ha habido representación de todas las familias en el acto
Los príncipes de Asturias han presidido hoy el funeral de Estado que se ha celebrado esta mañana a las 11:00 horas en el recinto ferial de Santa Quiteria para las nueve víctimas mortales de los terremotos de Lorca (Murcia).
Don Felipe y doña Letizia han asistido a la solemne y emotiva ceremonia, oficiada por el obispo de Cartagena, en representación de la familia real española –los reyes se encuentran de viaje de Estado a Suiza. Desde allí, durante su primer discurso de su visita oficial, el rey Juan Carlos ha expresado "de todo corazón" su "más profundo sentimiento de pesar" por los fallecidos y ha trasladado, en su nombre y en el de la reina Sofía, su "mayor solidaridad" hacia todas las familias afectadas por el seísmo. También el rey ha deseado "un pronto restablecimiento a los heridos" y ha agradecido las "afectuosas" palabras de solidaridad que le ha trasladado la presidenta suiza, Micheline Calmy-Rey, en estos "momentos de dolor y tristeza" en España.
Los príncipes de Asturias, con rostro compungido y de riguroso luto, trataron de dar apoyo y consuelo a los familiares de los nueve fallecidos minutos antes de que se celebraran en el interior de la nave las exequias para cuatro de las víctimas, puesto que los parientes de las cinco restantes han preferido una ceremonia íntima, aunque ha habido representación de todas las familias en el acto. Los herederos expresaron sus condolencias y fueron dándoles la mano y besando uno a uno en el marco de un respetuoso silencio, sólo roto por los llantos de los familiares y las palabras de cariño de los príncipes, quienes visitarán hoy el barrio de La Viña, las ruinas de la iglesia de Santiago y la unidad de control de emergencias del 112.
El obispo de Cartagena, el monseñor José Manuel Lorca Planes, ha recordado a los nueve fallecidos y a los dos bebés que no llegaron a nacer -dos de las víctimas estaban embarazadas- al inicio de esta emotiva despedida. Comenzó la homilía con un saludo "desde el corazón" a las familias y a las autoridades presentes."No es fácil tratar de consolar cuando uno tiene el corazón roto", ha dicho Lorca Planes. Antes de la bendición final, monseñor Lorca Planes procedió a rociar con agua bendita e incienso los cuatro féretros presentes en el recinto de Santa Quiteria, aunque el obispo de Cartagena ha insistido en que el funeral se celebraba para recordar a los nueve fallecidos, y, a continuación, uno de los sacerdotes ha leído una carta de condolencias del papa Benedicto XVI para las familias de las víctimas, los heridos y los damnificados firmada por el secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone.
A las honras fúnebres han asistido también el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; el ministro de Fomento, José Blanco; y el presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps; el presidente de la Región, Ramón Luis Valcárcel; el delegado del Gobierno, Rafael González Tovar; y el alcalde de la localidad, Francisco Jódar, entre otras autoridades locales y regionales.