La reina Sofía como en casa en su Grecia natal

Por hola.com

No es la primera vez que visita su tierra aunque quizá sí haya sido ahora cuando le han hecho uno de los regalos más originales. La reina Sofía ha regresado a casa, a su Grecia natal, para conmemorar, con diferentes actos, los 700 años transcurridos desde el inicio de la presencia catalano-aragonesa en Atenas, cuando la victoria sobre las tropas del duque franco Gautier V de Brienne en la batalla del Cefiso permitió la creación de un Estado que duró hasta 1388.

VER GALERÍA

PINCHE SOBRE LA IMAGEN PARA VER LA GALERÍA DE FOTOGRAFÍAS

Su primera parada fue la Acrópolis de Atenas, una de las maravillas mejor conservadas y más visitadas de la Antigüedad. Allí descubrió una placa de mármol, que reproduce las palabras pronunciadas en 1380 por el rey Pedro IV de Aragón: “El Castillo de Atenas es la joya más preciada del mundo, tal que apenas todos los reyes cristianos juntos podrían construir uno igual". Estas palabras están consideradas como el primer reconocimiento de la admiración de Occidente por la herencia griega en la época medieval. Además es la única referencia que existe en el recinto que alude a otro país, junto con la placa del siglo XIX que recuerda al arqueólogo francés Charles Ernst Beulé.

Durante su paseo por la colina, bañada por el sol mediterráneo y que tiene unas espectaculares vistas de la ciudad, doña Sofía se interesó por los trabajos de restauración que se están haciendo en diversos restos y visitó los talleres de los expertos en recuperación de columnas y muros de mármol del Panteón y el templo de Atenéa Niké. Fue allí donde se le entregó el curioso obsequio que formará parte ya de su colección de presentes: un martillo, idéntico al que utilizan estos trabajadores para labrar y pulir los materiales que utilizan.

VER GALERÍA


De nuevo cercana, sonriente y mostrando un gran interés por las explicaciones de sus acompañantes, doña Sofía terminó el día en la Sede del Instituto Cervantes, donde se inauguró la exposición Un mar de leyes, que muestra objetos y obras que recorren las relaciones diplomáticas entre la Corona de Aragón y Grecia. La Reina ha regresado a su tierra pocos días después de su viaje a Colombia y Ecuador, donde supervisó algunos de los proyectos de cooperación de España y donde sintió el calor y el cariño que le brindaron las ciudades y pueblos a su paso.