La Familia Real española disfruta de sus últimos días de vacaciones en Mallorca junto a Noor de Jordania y Rosario Nadal
El tiempo libre si no se puede compartir no es vacación. La Familia Real española disfruta este verano de unas vacaciones más cortas que otros años, pero intensas como siempre gracias a que son acompañadas por toda la familia y por grandes amigos. Hemos sido testigos en estos días de descanso de los miembros reales de momentos de diversión en familia, en tierra y en alta mar. La reina Sofía ha recorrido Palma en calesa con su nuera, la Princesa de Asturias, y sus nietas, las infantas Leonor y Sofía; ha ido de compras con sus hijas, las infantas Elena y Cristina, y su sobrina, María Zurita, y ha ejercido de abuela con todos sus nietos, que se descubren entusiastas del deporte náutico. Y ahora la Familia apura sus últimos días en la isla balear también con amigos de siempre, como Noor de Jordania y Rosario Nadal, que como otros años fue invitada con sus hijos al Fortuna, el gran barco que el gobierno balear regaló a los Reyes para que disfrutasen en aguas del Mediterráneo.
Noor de Jordania descubre estos días con la Reina los rincones de la isla balear. Juntas han disfrutado de jornadas marineras a bordo de las embarcaciones reales y juntas, acompañadas por Tatiana Ratchild y su marido, el doctor Froucheau, buenos amigos también de doña Sofía, handisfrutado de jornadas de compras por el centro de Palma. Ambas soberanas, como dos turistas más, recorrieron las céntricas calles de la ciudad mirando escaparates con altos en el camino en algunas de las tiendas, según informa el diario mallorquín Última Hora en su edición digital. Tras lo cual se dirigieron a la plaça del Mercat, donde doña Sofía había dejado aparcado su nuevo coche eléctrico frente a la Audiencia Provincial, y pusieron rumbo al palacio de Marivent. Las vacaciones se acaban, pero si se disfrutan con amigos cunden el doble.