Las vacaciones de la Familia Real española han llegado a su fin, después de pasar unos días de verano en Mallorca, y han vuelto al trabajo con la agenda llena de compromisos.
El Rey junto al presidente de Palestina, Mahmoud Abbas
El primero en ponerse manos a la obra fue don Juan Carlos, que regresó a Madrid antes que la Reina y los Príncipes de Asturias para comenzar sus audiencias en el Palacio de La Zarzuela con los representantes de las diferentes formaciones políticas. El pasado lunes se reunió con el coordinador de Irquierda Unida, Cayo Lara Mora, el martes con el secretario general de Unión General de Trabajadores, Cándido Méndez y el miércoles con el presidente de Palestina, Mahmoud Abbas, con motivo de la gira que está realizando por varios países árabes y europeos.
Los Príncipes de Asturias también han retomado sus agendas, después de apurar al máximo sus últimos días en Mallorca, donde este verano han estado poco tiempo, ya que regresaron el 26 de agosto después de haber estado casi dos semanas en las islas griegas y Turquía junto a sus hijas, las infantas Leonor y Sofía. La última imagen de la familia antes de partir a Madrid fue tomada en el parque Marineland, donde los Príncipes, acompañados por la reina Sofía, llevaron a sus hijas para que disfrutaran viendo a los animales.
Y de esta veraniega imagen, en la que aparecían vestidos de manera informal, el miércoles, don Felipe volvió a ponerse su traje y doña Letizia se subió de nuevo a sus tacones para volver al trabajo. Juntos recibieron en audiencia a las jugadoras, cuerpo técnico, directivos y patrocinadores del club de balonmano femenino "Itxako Reyno de Navarra" y a una representación de distintas asociaciones hispano-rumanas en España. Después el Príncipe recibió en solitario a una representación de la Cámara Oficial de Comercio e Industria de Briviesca y a la XII Promoción de Funcionarios del Cuerpo Superior de Interventores y Auditores del Estado.
Para la ocasión, doña Letizia lució una falda por la rodilla y un polo de color gris y unos originales zapatos del mismo color con flecos en el empeine y una cremallera dorada en el talón y que, para sorpresa de muchos, no llevaban plataforma, como la mayoría de los zapatos que lleva últimamente, los famosos "Letizios", aunque sí llevaban mucho tacón. Por su parte, tanto el Príncipe como el Rey siguen llevando la barba que tanto llamó la atención en la tradicional cena de despedida del verano en el palacio de la Almudaina.