La reina Sofía, las infantas Elena y Cristina y sus respectivas familias ya se encuentran de nuevo en Palma de Mallorca. Después de haber pasado una semana en Grecia, con motivo de la celebración del bautizo del quinto hijo de los príncipes Pablo y Marie Chantal de Grecia, la Reina, sus dos hijas y sus nietos mayores han regresado a la isla balear para disfrutar de la segunda parte de sus vacaciones en Marivent y despedir esta semana a los Duques de Palma y sus cuatro hijos que se mudarán en breve a Washington.

Nada más aterrizar, doña Sofía ha vuelto a compartir con sus hijas uno de esos planes que tanto gustan a las mujeres: una mañana de compras. La Reina, la Duquesa de Lugo y la Duquesa de Palma fueron hoy de tiendas por el centro histórico de la ciudad, concretamente por las inmediaciones del paseo del Borne, donde se encuentran algunos de los artículos preferidos de la Reina, como las camisas de Ralph Laurent, los relojes de Swacht, la cosmética de Body Shop y la bisutería de mercadillos. Con esta nueva salida de la soberana y las Infantas, así como con las efectuadas en su ausencia la semana pasada por el Rey y los Príncipes de Asturias con sus hijas, la Familia Real española ha querido mostrar una actitud de total normalidad después de los atentados de ETA en la isla.

El Rey ha lanzado un mensaje tranquilizador -la banda terrorista “no conseguirá alterar la normalidad democrática ni la vida de Mallorca”- y todos los miembros de la familia han secundado sus palabras con sus apariciones públicas. La única ausencia en estos momentos en Marivent, y por motivos de agenda oficial, es la del príncipe Felipe, que abandonó ayer Palma para representar a España en la toma de posesión del reelegido Presidente de Ecuador, Rafael Correa. Mientras, la Princesa de Asturias y las infantas Leonor y Sofía le esperan en Palma de Mallorca.