Un día como hoy, hace cinco años, los Príncipes de Asturias contrajeron matrimonio. Si bien la significativa ocasión se ha festejado con profusión de felicitaciones, especiales y semblanzas de don Felipe y doña Letizia en todos los medios de comunicación, los Herederos no han querido marcar este primer lustro de casados con grandes celebraciones.  Han vivido su aniversario de boda como cualquier otro día de su vida juntos, trabajando, aunque sin descuidar la fecha. Han rendido homenaje en cada uno de los detalles a este amor, intacto de ilusión y consistencia, que cumple hoy su quinto año, durante el solemne acto de entrega de las 200 becas de posgrado para estudios en el extranjero de la Fundación Caja Madrid. Un acto, celebrado este mediodía, en la sede de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, en el que los Príncipes recibieron la felicitación masiva de los asistentes y en el que volvieron a regalarse numerosos gestos de complicidad.

Los Príncipes de Asturias tenían previsto en una fecha tan especial apoyar con su presencia uno de sus grandes intereses: la investigación. Desde el año 2000, la Fundación Caja Madrid convoca anualmente becas para estudios de posgrado en algunas de las universidades y centros superiores de investigación de más prestigio de Estados Unidos, Canadá y Europa. Gracias a este programa, que en esta convocatoria cumple diez años desde su puesta en marcha, 677 titulados superiores universitarios habrán podido especializarse y formarse con estas ayudas al cierre del próximo curso académico. En esta convocatoria, la Fundación Caja Madrid concede 200 becas (125 becas nuevas y 75 becas de renovación por un segundo año de estudios).

Pero, becas aparte, todos querían también ser testigos en primera persona de la felicidad de los Príncipes y conocer el balance de estos cinco años de amor de su boca. Doña Letizia consintió a la prensa su deseo, cuando los Príncipes conversaron informalmente con los periodistas al término de la entrega, y confesó que continúan sintiendo el "mismo amor, la misma ilusión y el mismo compromiso" que hace cinco años.  Junto a los gestos explícitos -palabras, miradas, manos entrelazadas...-, hubo otros implícitos igualmente reveladores de la trascendencia de este día para la pareja:  don Felipe y doña Letizia conjuntaron sus atuendos de azul y rosa (modelo de ella y corbata de él)  con ocasión del quinto aniversario del día en el que conjuntaron sus vidas siempre. 

Los Herederos pasarán el resto del día en privado y estarán el mayor tiempo posible con sus hijas, las infantas Leonor y Sofía, con las que mañana asistirán a la Primera Comunión de Juan y Pablo Urdangarín y Borbón, hijos de la hija menor de los Reyes. La ceremonia religiosa se celebrará en la iglesia de los Capuchinos de Sarriá, en Barcelona, ciudad en donde tienen actualmente su residencia los Duques de Palma de Mallorca que próximamente trasladarán su domicilio a Estados Unidos.