La fiesta por el cuadragésimo cumpleaños de Guillermo de Holanda se convirtió ayer en una impresionante alfombra roja por la que desfilaron su elegancia distintos representantes de las casas reales europeas. Una de las parejas más atractivas fue la formada por los Príncipes de Asturias. El elegante y negro esmoquin de Don Felipe contrastó con la claridad del vestido elegido para la ocasión por Doña Letizia: una falda de tul en color marfil unida a un precioso cuerpo de paillettes gris plata. Con el pelo recogido en un discreto moño que le permitió lucir unos largos pendientes de perlas y brillantes, la Princesa de Asturias escogió un pequeño bolso de cristales como complemento, además de un brazalete de platino y diamantes. Muy elegante iba también la infanta Cristina, que optó por un diseño rojo de un solo tirante, algo en lo que coincidió con Matilde de Bélgica, sólo que ésta cambió el tono rojo por el naranja. A ellas se unió también Rosario Nadal, con un Valentino en tonos tierra.
Uno de los vestidos más llamativos de la celebración fue el escogido precisamente por la anfitriona, Máxima de Zorreguieta. La princesa sorprendió a todos con un vestido de escote 'palabra de honor', con cintura drapeada y volantes en la falda, en color fucsia. Con el pelo recogido también en un moño, Máxima completó el conjunto con un collar. Llamativo fue también el vestido escogido por Sophie Rhys Jones, con estampado en tonos marrones y azules. Mette-Marit prefirió, por su parte, el marfil en un vestido de escote cuardado y que adornaba con un lazo negro bajo el pecho. Una de las más fotografiadas fue Victoria de Suecia, muy guapa, que optó por un vestido en color chocolate con tirantes cruzados. Por último, la reina Beatriz escogió un vestido granate con remates en cuello y mangas.
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