Traje de novio de don Felipe: El Príncipe lució el día de su boda el uniforme de etiqueta del Ejército de Tierra, que se compone de una guerrera azul con tira de cuello y puños en color blanco, pantalón también azul, guantes blancos, gorra y zapatos estándar negros. La guerrera de don Felipe llevaba en la parte delantera siete botones dorados a fuego con el grabado del escudo del Ejército de Tierra y la Corona Real; en la bocamanga, una estrella de ocho puntas, que es la que corresponde al rango de comandante, y sobre los hombros, dos cordones entrelazados en hilo de oro que hacen un dibujo en ocho.
El pantalón con el que se casó el príncipe de Asturias era, al igual que la guerrera, de color azul marino, en gorina lana pura fría, (un tanto áspera, pero muy apropiada para la primavera), y lleva, además de dos bolsillos pequeños, una cinta negra en seda en los laterales.
El modisto de siempre Don Felipe de Borbón encargó a Cecilio Serna, el "sastre de casa" su traje de boda. El mismo artesano que le vistiera por primera vez con uniforme caqui, en 1985, cuando ingresa en la Academia Militar de Zaragoza. Y el mismo que le vestiría para las bodas de sus hermanas y de otros Príncipes herederos europeos. Maestro de la sastrería y posiblemente el mejor de los modistos tratándose de uniformes militares y diplomáticos, Cecilio se distingue, además de por su discreción, por haber vestido a las últimas tres generaciones de la [Familia Real española] desde hace 37 años: Conde de Barcelona, el rey don Juan Carlos y el Príncipe de Asturias.
En el uniforme del Príncipe (el primer modelo de este traje se hizo 1972 para el Rey) en el que emplearon cuatro metros de tela, trabajaron ocho personas y estaba hecho completamente a mano destacando, en todo el conjunto, el hilo de oro francés con el que fueron bordadas las bocamangas.