El Duque de Lugo utiliza un patinete eléctrico para desplazarse por los alrededores de su casa en Madrid
Poco a poco, y gracias a su esfuerzo y gran tesón, el esposo de la infanta Elena, Jaime Marichalar, se encuentra casi totalmente recuperado de la isquemia cerebral que, como nuestros lectores recordarán, sufrió hace año y medio cuando realizaba ejercicios de mantenimiento sobre una bicicleta estática en un gimnasio cercano a su domicilio en Madrid.
Actualmente, y también como nuestros lectores conocen, el Duque de Lugo está sometido a un tratamiento de rehabilitación especializado en una clínica de Nueva York, ciudad donde desde hace meses reside con su esposa y sus hijos. Ahora se encuentra pasando unos días en Madrid, a donde ha viajado para cumplir diferentes compromisos profesionales. Pero, por otro lado, como hombre de gran actividad que es, Jaime Marichalar aprovecha cualquier momento libre de que dispone para realizar alguna visita, hacer compras o, simplemente, dar un paseo por los alrededores de su domicilio. Y para desplazarse utiliza un método de transporte ciertamente curioso: un patinete eléctrico, quizá por comodidad porque tenga interés en llegar con mayor rapidez a su destino.
Acompañado por los agentes de seguridad
Días pasados, dado el buen tiempo reinante, salió a dar uno de estos paseos utilizando el patinete motorizado. Con gran naturalidad, el Duque de Lugo, que vestía pantalón vaquero, chaqueta veraniega y camisa a rayas, recorrió así varias manzanas de su barrio seguido de cerca por los agentes del servicio de seguridad que le acompañan.
Terminado el recorrido previsto, el Duque Lugo regresó a su domicilio de la misma manera que había salido; es decir, conduciendo el patinete, con el que llegó hasta la misma puerta edificio. Algunas personas le reconocieron rante el paseo y, tras observarle, hicieron comentarios de admiración sobre el afán e interés que demuestra para recuperarse de las secuelas que le dejó el infarto cerebral y de las que, como puede comprobarse por las imágenes que reproducimos junto a estas líneas, se encuentra ya muy recuperado.
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Acompañado por los agentes de seguridad
Días pasados, dado el buen tiempo reinante, salió a dar uno de estos paseos utilizando el patinete motorizado. Con gran naturalidad, el Duque de Lugo, que vestía pantalón vaquero, chaqueta veraniega y camisa a rayas, recorrió así varias manzanas de su barrio seguido de cerca por los agentes del servicio de seguridad que le acompañan.
Terminado el recorrido previsto, el Duque Lugo regresó a su domicilio de la misma manera que había salido; es decir, conduciendo el patinete, con el que llegó hasta la misma puerta edificio. Algunas personas le reconocieron rante el paseo y, tras observarle, hicieron comentarios de admiración sobre el afán e interés que demuestra para recuperarse de las secuelas que le dejó el infarto cerebral y de las que, como puede comprobarse por las imágenes que reproducimos junto a estas líneas, se encuentra ya muy recuperado.