La Familia Real de Dinamarca conquista el reino de Legoland
El reino de diversión de Legoland ha vuelto a acoger estos días a unos visitantes de excepción. Federico y Mary de Dinamarca repitieron de nuevo hace unos días lo que ya se ha convertido en toda una tradición en los últimos años durante sus vacaciones veraniegas en el castillo de Gråsten, al sur de Jutlandia: llevar a sus hijos al popular parque de atracciones.
La novedad de este verano era que en esta ocasión se llevaron a sus cuatro hijos y por primera vez también a sus sobrinos, los dos hijos mayores del príncipe Joaquín, los príncipes Nicolás y Félix. Sus hermanos, los príncipes Henrik y Athena, se quedaron en cambio en Gråsten con sus padres, los príncipes Joaquín y Marie. También se encontraban con los Herederos, con sus hijos y con sus sobrinos, la princesa Alejandra, hija de la princesa Benedicta, hermana de la reina Margarita, que llevó a sus dos hijos, Richard e Ingrid.
Como una familia más, los visitantes reales se mezclaron con todos los daneses allí presentes. Grandes y pequeños se lo pasaron en grande probando las distintas atracciones del parque. Los Herederos se dividieron y el Príncipe se encargó de acompañar a sus dos hijos mayores, los príncipes Christian e Isabella, a las más atrevidas como las montañas rusas, mientras que la princesa Mary se hacía cargo de los mellizos con los que se mostró una vez más muy cariñosa y atenta, especialmente con la niña de sus ojos, la pequeña princesa Josephine, que reclama siempre su atención.
Especialmente divertida fue la competencia para apagar un pequeño incendio montados en los coches de Lego que funcionaban a base de bombeo, pero en la que, a pesar de sus esfuerzos, el príncipe Federico se vio derrotado por sus dos sobrinos, que llegaron antes al lugar del siniestro. Los miembros de la Familia Real danesa, que pasan estos días de vacaciones en Gråsten como cada año, invitadaos por la reina Margarita II y el príncipe consorte Henrik, conquistaron otro año más el reino de Legoland con su simpatía, su cercanía, su sentido de la aventura y volvieron a proclamarse Reyes de esta legendaria tierra de Lego.