Los príncipes herederos Federico y Mary de Dinamarca abrieron ayer una visita oficial de tres días a México, adonde acudieron invitados por el presidente de este país, Enrique Peña Nieto.
Federico y Mary encabezan una delegación de 52 empresas danesas, en la que también viaja la ministra de Sanidad, Astrid Kragh, en una visita centrada en las relaciones comerciales entre ambos países en campos como la agricultura, alimentación, sanidad, energía y tecnología sostenible.
Los Príncipes, que habían llegado a México el domingo por la tarde, comenzaron la visita en la Fundación CTDUCA, que trabaja con personas con síndrome de Down. Y fueron precisamente dos niños del centro –Gael e Ivanna, de 7 y 6 años, respectivamente-, quienes los recibieron a su llegada a la sede de la fundación.
El Museo de Antropología fue el siguiente punto de la visita y fue justo ahí dónde la pareja se dejó fotografiar posando muy cariñosos e intercambiándose tiernas miradas de amor, que dejaron patente que tras 9 años de matrimonio y cuatro hijos en común, su relación sigue tan viva como el primer día.
Tras recorrer las diferentes estancias del museo, Federico y Mary fueran recibidos por Peña Nieto y su esposa, la actriz convertida en primera dama, Angélica Rivera, en su residencia oficial de Los Pinos. Fue un encuentro muy cordial, en el que se pudo comprobar la similitud de estilos entre la Princesa danesa y la esposa del Presidente mexicano, pues en esta primera cita ambas se decantaron por un peplum, Mary con estampado floreado, y Angélica adornado con un romántico lazo, pero al fin y al cabo, un peplum.
Pero la princesa Mary de Dinamarca y Angélica Rivera, quienes se han colado en algunas de las listas de más elegantes, no solo comparten estilo y elegancia, sino también su principal labor, el de madre, ya que la primera dama mexicana tiene tres hijas, Sofía, Fernanda y Regina, que conviven en perfecta armonía con los otros tres hijos de su marido, Paulina, Alejandro y Nicole.
Tras el almuerzoen compañía del presidente mexicano y su esposa, Federico y Mary visitaron el Museo infantil Papalote y aprovecharon para saludar a un grupo de niños mexicanos que estudian en la Escuela Dinamarca. A pesar de que la comunicación fue complicada debido a la diferencia de idiomas, el carisma de los Príncipes se impuso sobre el protocolo y tanto Federico como Mary lograron conectar con los más pequeños.
El alcalde de Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, les entregó luego las llaves de la ciudad a los Príncipes herederos, que realizan por primera vez una visita oficial a México, donde la reina Margarita ya estuvo hace unos años.
La primera jornada de los Príncipes en tierras aztecas se cerró con un concierto benéfico a cargo de la banda danesa The Raveonettes, cuyas ganancias serán donadas para apoyar a una fundación que lucha contra la violencia de género.
El segundo día incluye entre otros compromisos un seminario empresarial, una visita al Congreso de los Diputados, la apertura de una exposición sobre diseño danés y una cena de gala.