Federico de Dinamarca, 'el príncipe de hierro', completa un durísimo triatlon animado por su esposa y sus hijos
Federico de Dinamarca completó ayer en Copenhague su primer "Ironman", una modalidad extrema de triatlon que incluye casi cuatro kilómetros a nado, 180 en bicicleta y para acabar, una maratón.
"El príncipe de hierro", como han bautizado los medios daneses al heredero al trono, tardó 10 horas y 45 minutos en hacer el recorrido, en el que recibió los ánimos de miles de compatriotas y de su familia.
Su esposa, la princesa Mary y sus dos hijos mayores, Christian e Isabella, estuvieron presentes en varias partes del recorrido, incluida la meta, donde estallaron en júbilo cuando Federico, exhausto, cruzó la línea final levantando el puño derecho en señal de victoria.
Junto a ellos, miles de personas rompieron en aplausos para saludar la hazaña del primogénito de la reina Margarita II, quien al término de la prueba se mostró muy emocionado por los ánimos recibidos. "Fue fantástico. Significó mucho para mí que mi familia y mis amigos me animaran. Pero el apoyo tan grande que me dio la gente de Copenhague y el resto de los daneses, significó muchísimo", dijo.
Lo peor fueron los últimos 10 kilómetros del maratón, que el príncipe reconoció que se le hicieron muy largos, aunque concentrarse en tratar de mantener un ritmo constante le ayudó a continuar.
Federico, de 45 años y que decidió hace dos que participaría en el "Ironman" de Copenhague, confesó estar "muy contento" por su hazaña, una más de una vida que siempre ha estado muy vinculada al deporte.
Además de su conocida afición por la vela, que le lleva a competir regularmente en pruebas internacionales, Federico es un amante de otras actividades más extremas. Ha corrido varias maratones y años atrás participó incluso en una expedición en trineos tirados por perros en Groenlandia.