De los ‘rollitos primavera’ de la reina Margarita, de un aterrizaje imposible y de los reflejos de la princesa Mary de Dinamarca
La anécdotas de la Familia Real danesa durante su visita oficial a Vietnam
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Las agendas oficiales de las Familias Reales están diseñadas al milímetro, pero la actualidad escapa al control de la previsión. A veces trastoca los programas de los viajes de Estado y a veces los alimenta de anécdotas. Así ha sido también en la visita a Vietnam de la reina Margarita y su esposo, el príncipe Henrik, junto a los Herederos de Dinamarca. Los miembros reales han vivido estos días experiencias de todo tipo. Desde curiosas actividades programadas, pasando por situaciones graciosas, hasta algún susto. Una de esas ocurrió cuando el viento estuvo a punto de jugarle una mala pasada a la princesa Mary y llevarse su sombrero, pero la Heredera que ya tiene maestría en este tipo de aprietos demostró reflejos y lo cogió al vuelo con una mano.
Otra fue ver a la Reina y el Príncipe consorte con mandil y cocinando rollitos de primavera. La escena tuvo lugar durante su visita a un resaturante que sirve de escuela de cocina para niños de la calle en el centro de Hanoi, un proyecto que desde hace una década enseña en dos años a los niños a hacer comida, servirla y a hablar inglés, con el propósito de que luego puedan trabajar en otros establecimientos de la ciudad, como así ha ocurrido. Los visitantes reales no se limitaron a simplemente a hablar con su dueño y con los niños y recorrer las instalaciones, sino que se pusieron el delantal de cocina y aprendieron a preparar, entre mordisco y mordisco, el entrante oriental.
La Reina especialmente se ha mostrado muy activa en este viaje, en el que también ha aprendido a hacer cerámica. El martes, aprovechando que el príncipe Henrik y el príncipe Federico visitaban varias empresas y participaban en semanarios de negocios, Margarita y su nuera visitaron una fábrica de cerámica en Ba Trang, a las afueras de Hanoi, donde ambas tuvieron la oportunidad de iniciarse en las complicadas técnicas cerámicas. A la soberana, cuyas inclinaciones artísticas son conocidas, no hizo convencerla mucho para que agarrara un pincel para decorar piezas de artesanía, ante la atenta mirada de la princesa Mary, que siguió el ejemplo de su suegra. Fue otra de las imágenes de su visita.
Además de seminarios, encuentros empresariales y otras actividades también ha habido momentos para lucir las mejores galas. Primero, el lunes por la noche, en una cena en el palacio presidencial de Hanoi, invitados por el presidente Triest Kim Chi y su esposa Thi Kim Chi, y donde la princesa Mary brilló con un vestido de seda claro con encajes, mientras la Reina lució una falda rosa y una blusa de seda blanca, un conjunto que ya había llevado un año antes cuando visitó al presidente de Tanzania, Jakaya Kikwete. Al día siguiente, la familia real danesa le devolvió la invitación al presidente y su esposa con un banquete de gala en el Templo de la Literatura de Hanoi.
Otro de esos momentos imprevistos fue a causa de la tormenta tropical Mirinae, que en las últimas horas ha causado un centenar de muertos en Vietnam y Camboya. Obligó ayer a la Familia Real danesa a alterar sus planes durante su visita oficial. La reina Margarita, el príncipe consorte Henrik y los príncipes herederos Federico y Mary tenían que reunirse en la ciudad de Hué. Los Herederos partieron primero en un vuelo desde Hanoi y aterrizaron sin problemas en Hué. Pero para cuando la Reina y su esposo tenían previsto aterrizar más tarde, la tormenta tropical había descargado toda su ira sobre el aeropuerto de esta localidad. El piloto intentó por dos veces aterrizar, pero las malas condiciones meteorológicas lo obligaron a desistir y a aterrizar en Da Nang, 150 kilómetros al sur. Desde allí estaba previsto queviajaran más tarde, probablemente en autobús, hasta Hué, donde hoy continuará la visita.
Los príncipes Federico y Mary continuaron en cambio con su programa sin problemas y asistieron anoche a un concierto con músicos daneses y vietnamitas en el pabellón de deportes de Hué. "Todo está bajo control. La Reina y el Príncipe consorte se lo han tomado con calma. Debían haber salido a navegar esta tarde, pero nos lo tomamos con buen humor", dijo al diario "BT" el embajador danés en Vietnam, Peter Lysholt Hansen. El incidente no parece haber afectado al ánimo de la comitiva, en especial al príncipe Henrik, que durante la visita de hoy a la tumba de Minh Manh, en medio de la incesante llovizna, improvisó con humor una especia de danza de la lluvia, con impermeable amarillo y con su bastón, lo que provocó las risas de la reina y de los príncipes, también protegidos con chubasqueros y paraguas.