Por la majestuosidad se reconoce a una Reina. Hoy, cuando se cumple el primer año de la subida al trono de Felipe y Matilde de los belgas, hemos vuelto a ser testigos de esa notoria transformación -de Herederos en Reyes- en la misa Te Deum con la que tradicionalmente arrancan las festividades del Día Nacional de Bélgica. Una jornada que conmemora la ratificación de la Constitución belga en 1890, durante el reinado de Leopoldo I, y ahora también la investidura de los actuales soberanos.
La ceremonia ha tenido lugar a las diez de la mañana y, como es tradición, en la Catedral de San Miguel y Santa Gúdula de Bruselas. El hecho de que la festividad nacional coincidiera con el primer aniversario del ascenso de los nuevos reyes Felipe y Matilde se ha dejado sentir en la afluencia de público, mucho mayor que en otras ocasiones. Así, más de 600 personas esperaban desde primera hora de la mañana la llegada de los soberanos a la catedral para saludarles y felicitarles por estos doce meses de reinado.
La estelar aparición de hoy de los Reyes de Bélgica se recordará. Y es que la reina Matilde ha causado sensación al puro estilo de Máxima de Holanda, luciendo sonrisa y, a la par, un espectacular sombrero de color naranja intenso de su habitual sombrerera, Fabienne Delvigne. Los Reyes han acudido acompañados de sus cuatro hijos, que han debutado en este señalado día: la princesa heredera Elisabeth de la mano del príncipe Emmanuel y el príncipe Gabriel de la mano de la pequeña, la princesa Eleonore. Todos ellos han sido recibidos con un gran aplauso.
Si los Reyes asistieron a la misa Te Deum en Bruselas, los demás miembros de la Familia Real se desplazaron a diferentes partes del país. La princesa Astrid y su esposo, el príncipe Lorenzo, se trasladaron a Brujas donde, en la Catedral de San Salvador, presidieron la misa. Por su parte, el príncipe Laurent y la princesa Claire hicieron lo propio en la Catedral de San Albino de Namur.
Esta tarde está previsto que toda la Familia Real esté presente en Bruselas para el desfile militar y que, a continuación, participen en la fiesta popular del Parque Warande de la capital europea. Las celebraciones se cerrarán con los típicos fuegos artificiales en la Plaza del Palacio. Los únicos ausentes este año serán la reina Fabiola, por razones de salud, y los antiguos reyes Alberto y Paola, que estos días disfrutan de sus vacaciones.