Las tintas vuelven a su cauce. Felipe y Matilde de Bélgica se casaron por amor, según la periodista especialista en Casas Reales Brigitte Balfoort en una biografía de la Heredera belga con el título La princesa Matilde, sus primeros 40 años, que se publica esta semana y que contradice las informaciones aparecidas en los últimos meses en la prensa belga que apuntarían a un supuesto matrimonio arreglado entre los Príncipes.
"Los príncipes Felipe y Matilde se conocieron de una forma muy normal en una fiesta en el castillo de Beloeil en Henao", según Balfoort. La Princesa, que no habría estado en la lista de invitados a esa fiesta -su familia no pertenecía al más alto rango de la aristocracia belga- si no hubiera sido por su activa participación en las procesiones de enfermos al santuario de Lourdes, atrajo "con sus dones sociales al Príncipe y consiguió tener una cita con él, a la que siguieron muchas más. El resto es historia".
Y, en su relato de esa historia, no ha obviado la polémica: "No he encontrado más que unanimidad en el círculo íntimo de los Príncipes de que su matrimonio no fue arreglado. En cualquier caso, lo contrario no sería lógico: si hubieran querido ayudar al Príncipe a encontrar candidatas para casarse, no hubieran buscado en la baja aristocracia", según las declaraciones de Balfoort a los periodicos del grupo belga de comunicación De Persgroep.
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