La Reina es una gran abuela y así lo demuestra siempre que puede. Si el lunes celebró con su nieta, la infanta Sofía, su sexto cumpleaños en Madrid, el martes viajó hasta la Ciudad Condal para hacer lo propio con su nieto, Miguel, que cumplía 11 años. Doña Sofía viajó sola, con la única compañía de su chófer, y se dirigió hasta el Palacio de Pedralbes, donde disfrutó de una jornada familiar.
Para la Reina su familia es muy importante y no duda en desplazarse hasta donde haga falta por ellos. De hecho, el año pasado viajó hasta Washington para acompañar a Miguel en su décimo cumpleaños. La revista ¡HOLA! publicó las imágenes de doña Sofía llegando por sorpresa a la entonces casa de su hija, la infanta Cristina. Por primera vez, y aun tratándose de una actividad privada, Zarzuela dio a conocer el viaje de la Reina, quien hacía cinco meses que no veía a sus nietos. Más concretamente, desde su última visita a Estados Unidos, en noviembre de 2011, poco después de conocerse la implicación de Iñaki Urdangarín en el caso Nóos.
Doña Sofía sabe la difícil situación por la que está pasando su hija Cristina y toda su familia. Según las últimas noticias, Iñaki Urdangarín podría marcharse a Qatar, país al que le acompañaría su esposa y sus cuatro hijos. Esto supondría un duro golpe para la Reina, que volvería a estar lejos de sus nietos. Por eso, aprovecha ahora que aún los tiene cerca para disfrutar de momentos familiares como éste, aunque la situación no sea muy propicia para celebraciones en la familia Urdangarín.