Naruhito de Japón habla del delicado estado de salud de su padre, el emperador Akihito, durante la celebración de su 52 cumpleaños
El príncipe heredero ha ofrecido una rueda de prensa y ha posado junto a su mujer, Masako, y su hija, Aiko
El príncipe Naruhito de Japón ha cumplido 52 años y en el tradicional discurso que ofrece a los ciudadanos con motivo de esta celebración ha hablado del delicado estado de salud de su padre, el Emperador Akihito, y ha posado junto a su mujer, Masako, y su hija, Aiko. El príncipe heredero, que actualmente despacha todas las actividades oficiales de Akihito desde que se sometió a una operación de bypass cardíaco el pasado sábado 18 de febrero, insistió la rueda de prensa ofrecida con motivo de su cumpleaños, que su deseo es ayudar a su padre a sobrellevar sus tareas oficiales. "Al tener en consideración la edad del emperador, es necesario reducir su carga de trabajo", explicó el heredero al trono de crisantemo en declaraciones recogidas por la agencia Kyodo.
Al ser preguntando sobre si considera necesario introducir un límite máximo de edad para ocupar el trono de Japón, Naruhito rechazó pronunciarse y tan solo añadió que "existen varias opciones disponibles" para reducir la agenda oficial del emperador. Akihito, emperador desde 1989, se encuentra delicado de salud ya que, además de ser operado de cáncer de próstata en 2003 y sufrir una hemorragia estomacal en 2008, le fue diagnosticada el año pasado una arteriosclerosis coronaria.
El príncipe heredero tampoco quiso especificar su postura con respecto a la propuesta, que se debatirá este mes en el parlamento, de modificar la ley para permitir que las mujeres de la familia imperial nipona, que cada vez cuenta con menos integrantes, no pierdan su condición noble al contraer matrimonio con plebeyos.
Por su parte también ha hablado de su familia y al referirse a su esposa, la princesa Masako, en tratamiento médico desde hace años debido a una depresión inducida por el estrés, expresó su deseo de que "poco a poco pueda ampliar el alcance de sus actividades". Sobre la princesa Aiko, de 10 años, Naruhito aseguró que ahora se siente segura y muy integrada en su colegio, donde supuestamente sufrió un caso de acoso que le produjo ansiedad. Su madre, que tras el incidente asistía con ella a clase, ya no va con ella a la escuela.
También recordó a los afectados por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo ante la cercanía del primer aniversario de la catástrofe que devastó el noreste de Japón. "Me siento muy alentado por el hecho de que las personas afectadas por el desastre están haciendo esfuerzos de manera conjunta en pos de la reconstrucción a pesar de la dureza de su situación", dijo.