La esposa del heredero al Trono de Japón, la princesa Masako, expresó hoy su solidaridad con los afectados por el terremoto y el tsunami del pasado 11 de marzo con motivo de su 48 cumpleaños. En un comunicado difundido por la agencia local Kyodo, Masako, en tratamiento médico desde hace casi nueve años debido a una depresión inducida por el estrés, explicó que la catástrofe "fue demasiado impactante como para definirla con palabras". En este comunicado, se refiere a los habitantes de las zonas afectadas por la catástrofe de marzo y manifiesta que continúa "siguiendo de cerca su senda hacia la recuperación".
La princesa, prácticamente apartada de la vida pública para tratar su enfermedad, asistió en varias ocasiones de este año a visitar víctimas del terrible terremoto que sufrió Japón el pasado mes de marzo. Estas apariciones oficiales hicieron pensar que la princesa se encontraba mejor y dispuesta a retomar su actividad pública.
Sin embargo, de acuerdo con un comunicado remitido por el equipo médico a Kyodo, la princesa heredera no se encuentra bien en ocasiones, de manera que sus actividades continuarán siendo muy limitadas. Continúa teniendo -según el equipo médico que la trata- síntomas tales como dolor de cabeza y de estómago.
Masako se vio apartada de la vida oficial de la familia Imperial en el 2003 cuando la Casa Imperial reveló que sufría de estrés, que algunos achacan a la rigidez del protocolo de la Casa Imperial y a las fuertes presiones que ha soportado para tener un hijo varón que perpetúe la línea imperial nipona.
Un año más, Masako, conocida como "la princesa triste", hizo referencia en el escrito a su hija, la princesa Aiko, de 10 años, cuya vida escolar "ha ocupado una importante porción" de su rutina diaria este año. Aiko, única hija de la princesa Masako y su marido, el príncipe heredero Naruhito, ha asistido a clase este último año acompañada de su madre. La niña acude al colegio Gakushuin y debido a la ansiedad que le creaba el “comportamiento brusco” manifestado hacia ella por algunos de sus compañeros, su madre decidió acompañarla a las clases, no sólo a su llegada al centro, sino quedándose con ella mientras los profesores impartían las lecciones. "Las cosas parecen avanzar en la buena dirección", concluyó en este sentido la princesa heredera en el comunicado que ha enviado hoy, y también insiste en que Aiko asiste cada vez a más clases sola.
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