Kardam de Bulgaria vuelve a su residencia en Madrid dos años después de su grave accidente
El Príncipe, que sigue en estado grave, ha estado recibiendo tratamiento para sus lesiones cerebrales desde el verano pasado en la Fundación Foltra en la localidad gallega de Teo
Kardam de Bulgaria vuelve a casa, pero sigue grave. El Príncipe, que se encuentra aún en estado crítico tras el accidente de coche que sufrió junto a su esposa, Miriam Ungría, hace ahora dos años, será trasladado en septiembre desde Galicia a su residencia en Madrid, según ha anunciado a la prensa búlgara su madre, Margarita Gómez Acebo.
El Príncipe, que sufrió aquel verano negro un traumatismo craneoencefálico severo y graves fracturas en sus dos manos, continúa sin poder comunicarse con sus familiares y sin poder abandonar la cama. "Su estado sigue siendo muy grave. Mi hijo sigue sin poder comunicarse con sus cercanos. Pero no perdemos esperanza. La esperanza siempre es lo último que muere", ha declarado la esposa del rey Simeón al diario búlgaro 24 chasa, que anuncia en portada el traslado del príncipe Kardam a la capital española.
Desde agosto del pasado año –a excepción de las vacaciones de Navidad, que las pasaron en Madrid-, el príncipe Kardam reside en la localidad gallega de Teo, próxima a Santiago, en una casa de alquiler especialmente equipada para sus necesidades y cercana a la Fundación Foltra, donde recibe tratamiento para sus lesiones cerebrales. Los Príncipes de Tirnovo se establecieron en Galicia hace un año en busca de nuevas alternativas para la recuperación del hijo mayor de los Reyes de Bulgaria. Finalmente, el príncipe Kardam, Heredero de la Corona en un país que abolió la monarquía en 1946, vuelve a casa dos años después del grave accidente y tras una costosa reparación y adaptación de la residencia.
Kardam y Miriam sufrieron un gravísimo accidente en agosto de 2008, cuando, a su paso por la localidad madrileña de El Molar, el Jaguar en el que viajaban se salió de la carretera. El coche, que conducía Kardam, chocó contra un árbol de la N-1 y volcó unos metros de la fachada de una vivienda. Un mes antes, habían celebrado doce felices años de matrimonio.