Altos vuelos, a bajo coste. Podría decirse que ésta ha sido la última lección práctica de Economía en tiempos de crisis que han dado los miembros de la Familia Real española. Mientras los miembros del Gobierno son protagonistas de una polémica por el uso de los aviones Falcon para sus desplazamientos de campaña electoral, la Reina ha mostrado la cara más sencilla y humilde de la realeza al viajar en un económico vuelo regular.
La reina Sofía compró este domingo un billete de avión de 15 euros para viajar desde Santander, donde se encontraba con motivo del Día de las Fuerzas Armadas, a Londres. Tomó, en concreto, el vuelo de la compañía de bajo coste Ryanair, que salió sobre las 17 horas, desde la capital cántabra rumbo a la inglesa, para ver a su hermano Constantino de Grecia, que se recupera en la UCI del hospital Wellington de una intervención cardiovascular a la que fue sometido el pasado viernes. Doña Sofía, que ha estado muy unida siempre a sus dos hermanos, se había trasladado la semana pasada hasta allí para acompañarle con el resto de sus seres queridos y, tras el paréntesis obligado por su agenda oficial, regresó el domingo a su lado.
La Casa Real confirmó a la agencia de prensa Servimedia este viaje low cost, al que se refirió como la "única opción" posible para volar desde Santander a Londres. Es más, los mismos responsables de Zarzuela aseguraron que los miembros de la Familia Real española utilizan habitualmente vuelos regulares para sus desplazamientos privados.
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