La princesa Aiko, única hija de los príncipes Naruhito y Masako, ha cumplido seis años y lo ha celebrado como cualquier niña de su edad, disfrutando del señalado día en compañía de sus seres queridos. Las fotografías difundidas con motivo del aniversario de la pequeña muestran a Aiko con sus orgullosos padres en los jardines del Palacio de Togu en Tokio. Como toda una señorita, con una larga y lacia melena de color negro recogida en una coleta, aparece en estas nuevas imágenes oficiales también jugando con dos amigos muy especiales, sus dos perros.
La princesa Aiko se convirtió, nada más nacer, en el centro de atención de los medios de comunicación al tratarse de la única hija del Heredero al trono nipón y, por tanto, de la futurible Emperatriz, si se hubiese producido un cambio en la ley sucesoria al Trono del Crisantemo, que data de 1947, y que sólo permite el acceso a los varones a la monarquía más antigua del mundo. Una posibilidad que prácticamente ha desaparecido en la actualidad tras el nacimiento de su primo, el prínicipe Hisahito, hijo del príncipe Akishino, que celebró también la pasada semana su 42º cumpleaños con unos retratos oficiales de su familia. La llegada al mundo de este bebé supuso el fin del debate sucesorio abierto en Japón por la inexistencia de un Heredero varón que relevara al príncipe heredero Naruhito y su hermano, el príncipe Akishino, dado que en el país aún sigue en vigor la ley sálica y ninguno de los dos hijos del Emperador tenían descendencia masculina.
Pero el hecho de que la princesa Aiko no vaya a convertirse, en prinicipio, en Emperatriz tras perder la línea sucesoria a favor del pequeño Hisahito, tampoco significa que deje de representar a la Familia Imperial. Como hija que es del futuro Emperador, desempeñará sin duda un papel importante de representación, y eso implica que seguiremos teniendo noticias suyas. Y puntualmente, cada mes de diciembre, de sus cumpleaños.