En sus más de dos años de relación, nunca había dicho una palabra sobre ella (Mary Donaldson) y sorprendió enormemente que lo hiciera por primera vez, abiertamente, durante un viaje privado, al otro lado del planeta, en la tierra natal de su novia, Tasmania, (Australia): 'No hay planes de matrimonio de momento. Nos los pasamos muy bien juntos, nos conocemos mucho más, pero Mary tiene que estar segura de poder vivir en Dinamarca. Es necesario que se adapte al frío invierno danés. Lleva su tiempo acostumbrarse a cuatro estaciones en lugar de las dos que tiene Australia'.
Encuentro con los padres de Mary en Tasmania
La entrevista con el Príncipe se desarrolla horas después de que éste aterrizara en la isla de Tasmania para participar en la Copa del Mundo de Drage con la embarcación Nanoq... Federico de Dinamarca no despierta demasiada atención y si no hubiera sido por sus guardaespaldas, la población local no le hubiera distinguido de los otros regatistas. Es la primera vez que está en Hobart, el verdadero hogar de Mary, (en esta ciudad está enterrada su madre), y, también, la primera vez que sus posibles futuros suegros se han dejan ver con él en público tal y como sucedió el pasado fin de semana cuando John Donaldson, padre de Mary, y Susan Moody, su madrastra, se acercaron hasta el Club de Yates real de Tasmania para saludarlo.
"Mary tiene que trabajar"
¿Por qué no ha venido con usted? (preguntan los periodistas). Hubiera sido una magnífica oportunidad para declararse... "Debe trabajar. Le hubiese encantado, pero no era posible. No tenía vacaciones. Es duro para ella pensar que yo estoy aquí, en su país, sólo, cerca de sus hermanas, Patricia Woods y Jane Stephens... Ya veremos si se puede escapar. Mary sabe que no he venido para hacer excursiones, sino para participar en la regata.
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