¿Qué opinan las 'wedding planners' españolas sobre la boda perfecta?
Preguntamos a cuatro expertas en la organización de bodas cómo conseguir que el día B salga redondo
¿Qué lleva a una wedding planner a convertirse en eso, en una organizadora de bodas? Muchas de las wedding planners de más renombre comenzaron su andadura en esto de imaginar bodas imaginando primero la suya, y poniendo tanta energía e ideas en el proceso que acabaron transformando esas ganas por tener una boda perfecta en una profesión. Otras se iniciaron primero en la organización de eventos, y terminaron diseñando el día más importante de decenas de parejas cada año. Si hay alguien que sepa de verdad de bodas, todo lo que implica organizarlas, el trabajo que llevan y los nervios y la satisfacción de un día redondo, son ellas. Preguntamos a cuatro wedding planners españolas cómo tener la boda perfecta.
Bea Medina, de Nara Connection: "Para personalizar una boda es básico un nivel alto de implicación. A partir de ahí, lo más importante es tirar de ingenio y diseñar cosas que muchas veces toca hasta producir a mano, porque no existen. Por ejemplo, anotar (sin decir nada) una frase vista en un cuadro en casa de la novia, y diseñar un cartel para uno de los puestos de comida en base a eso; unas minutas impresas sobre pasta porque la familia del novio era italiana; unas bases para los meseros cortadas de una rama de un árbol; unas tablillas forradas con tela de yute, cosidas a mano una a una, para el listado de invitados; o bien unas plumas con la punta teñida al gusto de los novios para hacer unos móviles para una carpa... Son detalles que aprecian y valoran los novios, y los invitados notan que la atmósfera es especial y diferente. Más que centrarse en ideas de otras bodas, para tener la boda perfecta hay que intentar diseñar y producir algo único, que emociene en el día de la boda. Creo que la clave de la personalización es la autenticidad".
Eva Iglesias, de Bodas Colorín Colorado: "Una boda no son sólo las horas que te pasas vestida de novia: son los preparativos, son los nervios de tus amigas por qué se pondrán, son las peleas con tu suegra por el color del mantel, y cómo acabáis dejando que la otra elija por cariño. Son las fotos que tenías guardadas en un cajón, y que salen de nuevo para reírte con tus hermanos. Y por supuesto, sois vosotros, los únicos que tenéis que ser perfectos en vuestra boda. Una boda perfecta es difícil, palabra de wedding planner, porque a veces los imprevistos suceden. Pero lo más importante es que contéis con alguien que haga que los imprevistos sean previstos y que vosotros tengáis la boda más perfecta de todas: ¡una boda feliz!"
Marta Priu, de Barcelona Wedding Planners: "A unos novios que quieren una boda perfecta, realmente les recomendaría la contratación de una persona experta y profesional, que conozca el mercado y que les pueda guiar y asesorar en todo momento. Pero en el caso de que no pudieran, o no quisieran, lo que les diría es que le dediquen tiempo y se organicen bien. Que valoren los diferentes proveedores existentes; que se fijen en cómo trabajan, cómo es el servicio que ofrecen, la calidad, las referencias de sus trabajos y los precios. Que se apoyen en amigos y familiares cercanos, gente de su confianza, que puedan ayudarles a coordinarlo todo. ¡Es un momento muy importante y único en la vida que merece ser disfrutado al máximo!"
Sira Antequera, de Sí! Quiero: "El principal pilar del éxito de una boda es la gestión de los tiempos. Los invitados sólo notan el tiempo cuando está mal planteado, cuando se aburren y ha desaparecido la magia. Lo mejor de las bodas es justo lo que no se ve. También es imprescindible trabajar la iluminación para construir y vestir los espacios. La luz es lo que potencia u oculta, nos permite cambiar el ambiente, pasar de claroscuros barrocos a espacios evocadores con velas; llenar de sobriedad una zona, o 'calentar' la fiesta a golpe de color. En lo visual hay que atreverse, apostar por aquello que haga la boda especial. También hay que pensar que la comida es uno de los pilares de nuestro modo de celebrar, y que hay que mimar el paladar de los invitados, y recordar que somos sus anfitriones. La mejor boda es la que refleja quiénes y cómo son sus protagonistas: cada segundo que viváis es único, disfrutadlo, sonreíd y bailad."
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