Las Islas Canarias, nuevo escenario para bodas en la playa
El archipiélago acaba de legalizar las bodas a pie de playa en Las Teresitas, al norte de Tenerife
Casarse en las playas de España no es fácil, teniendo en cuenta que en gran parte del litoral español, darse el 'sí quiero' a orillas del mar está considerado un evento privado. Es decir, quedaría fuera de lo que la Ley de Costas considera un evento de interés cultural, y que suele ser a quienes se entregan las licencias correspondientes para celebrar un evento en una playa española. Sin embargo, recomiendan desde el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural, siempre es conveniente contactar a las gerencias locales para preguntar al respecto, y, de hecho, en algunas provincias -aún muy pocas, para desespero de las decenas de wedding planners que cada año reciben solicitudes de parejas que desean casarse en la playa-, existen localidades donde es posible, y el Ayuntamiento en cuestión incluso facilita estos procedimientos.
Una de las últimas en dar bandera verde a las bodas playeras han sido las Islas Canarias, que desde este mismo mes de agosto permite este tipo de ceremonias en algunas de las playas de sus siete islas, sumándose así a las otras pocas playas españolas donde es posible darse el 'sí quiero', como las de Castelldefels, en Barcelona, en las que llevan tramitando bodas desde hace tres años aunque allí suelen restringir el uso de sus playas para bodas a la temporada baja. Las tasas y la fianza para hacerlo, eso sí, cambian de una localidad a otra. El archipiélago, situado frente a la costa de Marruecos, está posiblemente entre los mejores destinos españoles pasa organizar una ceremonia de boda: Canarias tiene uno de los mejores climas del mundo, con una temperatura prácticamente constante de entre 19 y 23 grados, que se mantiene inalterable durante los 365 días del año.
¿QUÉ PASOS HAY QUE SEGUIR PARA CASARSE EN LA PLAYA?
Lo primero, solicitar el correspondiente permiso en la Demarcación Provincial de Costas, indicando cuántos metros cuadrados de playa se van a necesitar, la duración de la ceremonia y el número de invitados, así como los elementos decorativos que vayamos a necesitar. El motivo: una playa no se puede cerrar para un evento privdo de este tipo, por lo que es necesario buscar un equilibrio entre la boda y el resto de usuarios de la playa, tal y como explicaba hace unos días la delegada del Gobierno, María del Carmen Hernández Bento. Este motivo, junto con el calor en las horas centrales del día -especialmente en los meses de verano, que son los que concentran un mayor número de bodas al aire libre-, explica que la gran mayoría de ceremonias a pie de mar se organicen por la tarde, a última hora del día, para evitar grandes concentraciones de bañistas y curiosos. También es necesario pedir un informe al Ayuntamiento del municipio, y a la Consejería de Política Territorial del Gobierno de Canarias.
Un vez terminamos los procedimientos correspondientes a la playa, llega el momento de cerrar el resto del 'papeleo' propio de un matrimonio civil, y que puede cambiar mucho dependiendo de las nacionalidades de los novios: al igual que muchas parejas que se escapan a Bali o al Caribe para darse el 'sí quiero' con un paisaje paradisíaco de fondo, sin que ninguno de los miembros de la pareja sea necesariamente natural de la isla elegida, es más que probable que, en España, y a medida que se vayan regularizando las bodas en nuestras costas, veamos cada vez más parejas venidas de otras partes del mundo planeando casarse frente a la escenografía volcánica de Lanzarote, las aguas cristalinas de Fuerteventura o la vegetación de color esmeralda de la isla de La Gomera.
La falta de una regulación favorable de la Ley de Costas en lo que respecta a las bodas, se parece mucho, de hecho, a uno de los principales problemas bridal que los expertos españoles en organización de bodas nos detallaban hace unos meses, a propósito de la edición del 'Libro blanco de las bodas': mientras que otros países vecinos cuentan con atractivos turísticos aptos para contraer nupcias y que atraen a bodas de alto perfil (los castillos del valle del Loira, en Francia, por ejemplo, o el romance de ciudades como Venecia, con sus canales de fondo), en España contamos con nuestras playas como reclamo turístico, a pesar de que, hasta ahora, quedaban vetadas a las celebraciones nupciales. De hecho, alguna que otra pareja famosa que se ha dado el 'sí quiero' en nuestras playas se las ha tenido que ver con la multa corespondiente por la celebración de un evento que no cumplía con lo marcado por la ley.
Por este motivo, desde la plataforma siquieroislascanarias.com, que también se han sumado a la noticia de las nuevas bodas a pie de playa de Canarias, nos han recordado estos días los trámites para la celebración del matrimonio civil en función de la nacionalidad o lugar de residencia de los novios. El caso más sencillo: cuando los dos miembros de la pareja tienen nacionalidad española, o residan legalmente en España, ya que es posible celebrar el matrimonio legal en Canarias con sólo solicitar el correspondiente traslado del expediente desde el ayuntamiento de su municipio de residencia. Este trámite suele tardar unas tres semanas, y es fácil de incorporar a los preparativos preboda. Si niguno de los contrayentes tiene nacionalidad española, la cosa se complica, ya que es necesario consultar tanto con el Registro Civil de la localidad como con el consulado del país de origen. Y si solamente uno de los novios es español, o residente en España, es también recomendable consultar los trámites en el consulado correspondiente, aunque no suele haber problemas para que se celebre el matrimonio.