Tres 'tips' para reutilizar tu vestido de fiesta después de Nochevieja
Sácale partido a tu vestido de Fin de Año, reutilizándolo a lo largo de los próximos doce meses
Ya hayas invertido en un investment piece, un básico o un vestido de fiesta low-cost, tras las doce campanadas de Fin de Año llega el momento de plantearse cómo renovar esa nueva pieza de tu armario, pensada solamente para las ocasiones especiales. Una de las claves en esta nueva vida de las prendas de fiesta está en el nivel de etiqueta de la prenda en sí, y cómo hayamos decidido combinarla y con qué accesorios.
Un statement necklace, por ejemplo, un bolso de mano o unos zapatos pueden transformar un básico de libro, como el little black dress, en una prenda de fiesta perfecta, sin que haya que invertir ni tiempo ni dinero en darle la vuelta después de su primer (y muy especial) uso. Un ejemplo: el vestido de paillettes de estilo bodycon que Beyoncé lucía en un evento hace solo unas semanas, con manguita corta y cuello redondo, y que pertence a la actual colección de invierno de Topshop. La cantante ponía de manifiesto dos cosas con este look: una, que la silueta bodycon está pensada para resaltar las curvas femeninas, y es el aliado de fiesta más sexy incluso cuando apostamos por un little black dress. La otra es la capacidad de algunas celebs para pisar la alfombra roja con un vestido low-cost, y hacer que luzca como un modelo de pasarela gracias a la correcta combinación de peinado (en este caso, la melenita midi que ha arrasado en 2014), beauty look y complementos.
Otra que resulta ser una experta en estos lares es la it-girl Olivia Palermo, que da lecciones de estilo desde su blog que incluyen desde su vestido de novia con shorts y jersey de Carolina Herrera, hasta este look, también low-cost, que formaba parte de su reto de estilo durante treinta días el pasado mes de julio. El look recupera un vestido cóctel de rayas de Asos, y convirtiéndolo en un vestido de diario al sumarle una blusa también rayada de Max Mara, bolso de flecos de Carolina Herrera y zapatos cerrados de Tibi con print animal. La clave para transformar un vestido en un look de oficina está en este caso en los complementos, que sirven para 'romper' la línea del traje en dos (como por ejemplo un cinturón aunque también podríamos usar un fular), el contraste entre estampados y el maxibolso de día.
1. Flats metalizadas en color oro rosa, con pulsera tobillera y acabado en punta, de Gianvito Rossi. 2. Pumps de satén en color champán y negro con panel de PVC en la puntera decorado con cristales, de Miu Miu. 3. Sandalias de piel y ante, con acabado metalizado y mate, de Jimmy Choo. 4. Sandalias Jane en color negro, de Saint Laurent. 5. Loafers de piel en color negro, de Gucci. 6. Sling-backs de piel con detalle de piel entrecruzada, de Bottega Veneta. 7. Kitten heels, de Christian Louboutin.
Los zapatos son quizá la pieza más importante de nuestro vestuario cuando buscamos actualizar un look de fiesta y transformarlo en, o bien un segundo modelo de cóctel, o bien un look de diario. Una manera de facilitar esta transición es disponer en nuestro armario zapatero de varios modelos a diferentes alturas de un tipo de zapato que guarde algo en común con sus compañeros de espacio. Un ejemplo: una sandalia metalizada en oro puede tener varios homólogos en forma de sling-backs, tacones kitty, o incluso un mocasín o slipper de suela baja. El color permite combinar con un mismo vestido (de morado a verde esmeralda o negro), en diferentes ocasiones, adaptando la altura del zapato a la formalidad del evento.
El tercer y último tip de estilo para recuperar nuestro vestido de Nochevieja a lo largo de 2015 nos lo sirve en bandeja la Duquesa de Cambridge, que también suele incorporar de manera discreta prendas de firmas low-cost a su armario, en concreto de la firma gallega Zara, que parece dominar las hechuras del blazer a la vista de la cantidad de veces que esta prenda se ha hecho un hueco en el armario royal de Catherine Middletone. Una de las últimas, un modelo en navy con dobles botones dorados, que arrasaba en ventas poco después de que la Duquesa se dejase ver con él el pasado verano. El blazer o americana es una prenda clave a la hora de transformar nuestro vestuario, incluso el más festivo, rebajando o añadiendo grados de formalidad de manera o instantánea, además de guardarse otros ases en la manga, como la capacidad de entallar la silueta o equilibrala, especialmente si optamos por una chaqueta con largo a la cadera.