Solange Knowles, una espectacular novia con capa y pantalones

El otoño parece ser la temporada de las bodas por sorpresa. La última en sumarse a esta moda ha sido la hermana menor de Beyoncé, la también cantante Solange Knowles, una de las artistas que más comentarios ha generado en los últimos meses por sus impecables apariciones de alfombra roja, y que pasaba por el altar este fin de semana junto al productir musical Alan Ferguson. Hasta tres vestidos llegó a vestir esta novia, entre ellos dos modelos a cargo de Stephane Rolland, uno de los diseñadores de la Alta Costura de París que ya había vestido a la cantante en anteriores ocasiones. El más original: el que sirvió a la novia en su paseo hasta el Marginy Opera House de la ciudad, emplazamiento en el que se celebró la ceremonia, prolongada a lo largo de cuatro horas.

Además de la originalidad de aparecer mano a mano junto al novio (algo que se salta por completo la tradición de las bodas tal y como las conocemos), la novia escogió hacerlo en bicicleta, con sendas bicicletas de color blanco, la de ella con un ramo de flores en la cesta delantera. Su look: un mono en color crudo con escote de vértigo tanto en la parte delantera como a la espalda. Más detalles: las mangas capeadas de tipo murciélago, prolongadas hasta la rodilla, y el acabado pinzado del pantalón.

Una vez dentro de la Iglesia, la cantante cambió su look por un segundo modelo, casi idéntico al anterior, esta vez diseño de Humberto Leon, la mitad del equipo creativo de las firmas Kenzo y Opening Ceremony. El nuevo vestido de novia también incluía una capa -ésta con largo hasta el suelo, ejerciendo al mismo tiempo de velo y de cola-, sobre un vestido blanco de corte minimalista, acompañado exclusivamente de sendos brazaletes dorados, a juego con las punteras de los zapatos del novio. Él, por su parte, se decantaba por un esmoquin cien por cien en color blanco, firmado por Lanvin, a juego con el resto de invitados, todos vestidos en all-white incluída la hermanísima de la novia, la propia Beyoncé. La tendencia de vestir a los invitados de blanco se suma a la moda de las damas de honor a juego con la novia, que instauraba en su día Pippa Middleton y que más tarde han seguido otras famosas como Kim Kardashian o Poppy Delevingne.

El tercer y último vestido: el de la celebración posterior, también muy en la línea de los dos anteriores. Un diseño perteneciente a la colección Alta Costura de Stephane Rolland primavera-verano 2014, que servía al diseñador para abrir su desfile de la mano de la top española Nieves Álvarez a principios de este mismo año, y que también cuenta con un mono-pantalón muy ceñido a la cintura, con escote delantero y mangas en forma de capa, que caen en corte oblícuo sobre los hombros y brazos.

Como en otras bodas de famosos, las redes sociales servían de perfecto escaparate para revelar algunos de los aspectos más íntimos de la ceremonia, como las imágenes que Beyoncé compartía a través de su cuenta de Instagram, hasta el momento los dos únicos guiños al segundo traje de novia de esta larga lista, y que servía a su hermana para dar definitivamente el 'sí quiero'.