Despídete del blanco inmaculado: esta temporada lo que se lleva es el color. Una tendencia que se ha ido haciendo un hueco entre las preferencias y gustos más solicitados por las novias a lo largo de los años, y que esta temporada se hace más fuerte que nunca en las colecciones vistas en Nueva York o Madrid. Si no te atreves con el negro, la tendencia nupcial más sorprendente de 2011, la paleta cromática más romántica del momento puede que sea para ti: vestidos que hablan el idioma de los colores estivales, como el malva, el rosa empolvado, el madreselva o el azul.
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La forma de llevarlo: en los brocados de seda con motivos florales, a modo de lazos, fajines, cintas o en total look. Una alternativa refrescante y muy femenina, que permite crear sorprendentes contrastes gracias al ramo de flores, los zapatos o incluso el tocado de la novia. ¿Te atreves a ponerle una nota de color a tu vestido? Entra en la galería de imágenes para descubrir más.
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