Cibeles Madrid Novias: Isabel Zapardiez y Devota & Lomba

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Faldas de gasa drapeada con caídas en forma de pétalo, en blanco, gris perla y champán, que se combinan con cuerpos-tallo. Sobre la pasarela han destacado los sobrevestidos, capas e ingeniosas cazadoras de piel de manga abullonada, que se combinan con ligerísimas faldas de gasa bordadas enteramente en cristal, dando lugar a un sofisticado contraste para una novia global, que puede disfrutar tanto del bullicio de la Gran Manzana como de una boda rural. La diseñadora, que afirma haberse inspirado en todas y cada una de las mujeres que han pasado por el atelier que tiene enclavado en San Sebastián, apuesta por el color empolvado: rosas , malvas y verdes, que se realzan con plumas y aplicaciones vintage, y donde no han faltado las faldas abullonadas, más cortas por delante que por detrás, y un ingenioso vestido con bolsillos que ha arrancado los aplausos del público.

Más contenidas han sido las propuestas que Modesto Lomba ha presentado bajo su firma Devota&Lomba, donde el color natural de la seda se ha convertido en la línea de continuidad de la mayoría de vestidos. Una colección que parece construida a base de papel, medida al milímetro, donde ingeniosos pliegues en tejido rústico y texturizado, como las garzas o las tafetas, se combinan con enormes y sorprendentes plisados, que caen en forma de suave cola, como un inmenso origami de papel. Aplicaciones que recuerdan a las pajaritas y barcos de papel infantiles invaden las faldas y los fajines, y adquieren su modalidad más ingeniosa a la hora de construir los escotes, en forma de barco o caja, con fantasías en jacquard, cristal y plumetí.

Como contraste, las líneas más sinuosas apuestan por los volantes en cascada de sabor español, casi siempre combinados con un escote de proporciones geométricas, y las gasas plisadas se ciñen a la silueta mediante cintas y lazos, que se abren dejando al descubierto las diferentes capas de tejido.