Abdominales incorrectos: asegúrate de no practicarlos
El verano se acerca y empiezan a bombardearnos con la ‘operación bikini’. Primer pensamiento: hacer abdominales para eliminar esos molestos michelines. Pues ¡atención! no todos son buenos para la mujer ni para el suelo pélvico. Te contamos por qué
Si os vais a lanzar a la conquista de una tripa plana, adelante, pero hacedlo con conocimiento y sabiendo qué ejercicios son los indicados para no dañar el suelo pélvico. Uno de los ejercicios más conocidos se realiza en posición tumbada boca arriba con las piernas flexionadas y los pies apoyados sobre el suelo, elevando la cabeza y los hombros para aproximarlos a las piernas.
Todas, en algún momento arrebatado, nos hemos puesto a ello con la idea de que eran buenos y efectivos. Pero nada más lejos de la realidad, apuntad bien este dato porque es importante: este tipo de abdominales no son buenos para la fisionomía femenina.
¿Qué ocurre con nuestra musculatura para que no sean buenos? El movimiento del abdominal ‘tradicional’ implica una fuerte contracción de los músculos abdominales (principalmente los músculos superficiales del abdomen) y una flexión del tronco. Ambos mecanismos provocan un gran aumento de la presión dentro del abdomen y esa presión se dirige hacia nuestro suelo pélvico. Si éste se encuentra débil no soportará dicha presión y se debilitará todavía más, aumentando los riesgos de incontinencia urinaria y/o prolapsos.
Para evitar estos riesgos y recuperar la línea sin dañar nuestro suelo pélvico, tienes que asegurarte de que cuando realizas este tipo de ejercicios estás protegiendo el suelo pélvico. ¿Cómo? Descúbrelo en Centrada en ti. Te enseñamos cómo hacer ejercicios abdominales correctamente, qué tipo de deportes son buenos para el cuerpo femenino y qué alimentación es la más saludable para estar en forma.