Desde los 17 a los 60, en La Voz no hay límite de edad, la barrera está en las ganas que se tienen de trabajar. Diferentes estilos y variadas edades conviven en un escenario que tiene la llave del triunfo. Ellos aspiran a lograrlo. Ellos son La Voz. Pinche aquí para votar por su favorito.
Paula Rojo logro con su juventud, tiene 22 años, y su ukelele conquistar a Melendi. Esta asturiana estudia Traducción e Interpretación y siempre se consideró diferente y rara. Su refugio lo encontró en la música, que utiliza para componer y sacar todo lo que lleva dentro. Compone sus propias canciones, tocó un fragmento de una de ellas en las audiciones, y formó un dúo Érase un verano, con un amigo.
Pau Piqué, de 60años, es la voz de la experiencia. Procede de Cambrils, Tarragona, y a los 20 años decidió que lo suyo era la música. Durante unos años la compaginó con su trabajo, pero llegó un momento en que decidió apostar sólo por su pasión. Está muy orgulloso de haber doblado al catalán el repertorio de su ídolo, Frank Sinatra. Le apasiona el soul, el swing y los boleros.
Nuria Martínez viene de León y tiene 26 años. Comenzó a cantar siendo una niña y desde entonces tuvo claro que eso era su vida. Con 19 años una operación en las cuerdas vocales cambió su tono de voz, lo que le llevó a potenciar más su imagen y registro de rockera. Actualmente, tras haber formado parte de una orquesta, hace bolos con su grupo.
Mónica Guech tiene 25 años y nació en Liverpool, aunque vive en Barcelona. Ha formado parte de varios grupos musicales desde los 16 años. Tiene muy claro que no puede vivir sin cantar y sin tocar el piano, instrumento que utiliza para componer sus canciones. En la actualidad, tenía un proyecto en solitario que dejó aparcado para entrar en La Voz. ¿Su ilusión? Grabar un disco con sus propios temas (fue expulsada en la primera gala en directo).
Eduardo Ruimán no puede ver pero quizá por eso siente las melodías con más intensidad. Tiene 31 años y es de Tenerife. En 1992 se subió por primera vez a un escenario en un festival benéfico y en el 98 comenzó sus estudios de afinación y reparación de pianos. Desde 2001 al 2003 estudió composición y armonía para música ligera, compaginando estos estudios con bolos en los que cantaba música latina. Su capacidad de superación y su pasión por lo que hace le llevaron a grabar un disco en el 2000 (financiado por su tía).
Nieves Hidalgo tiene 36 años y es de Toledo. Se dedica a cantar flamenco y ha llevado su arte por Japón y Suiza. No tiene estudios musicales pero asegura que las tablas de un escenario son su mejor escuela. Ha colaborado además en discos y recitales de este género.
Héctor Roldán enamoró a Malú y seguramente a muchos espectadores también. Es de Sueca, Valencia, y tiene 27 años. Es de profesión socorrista aunque es en el escenario donde se siente como pez en el agua. Comenzó a cantar con 14 años y a los 19 dio su primer concierto haciendo versiones acústicas de Metallica y Megadeth. Siempre que su trabajo le deja tiempo se dedica a tocar en locales y a ensayar con su guitarra. ¿A quién no gustan esos ojos azules? (fue expulsado en la primera gala en directo).
Maika Barbero tiene 34 años y es de Tarragona. Siempre sintió cierto complejo por su físico y por eso no era fan de los concursos musicales. Sin embargo, en La Voz lo importante es precisamente lo que no se ve así que se animó. Su tono de voz hace dudar de si está cantando un chico o una chica pero es tan especial que encandiló a los jueces. Le encanta el rock y es una de las firmes candidatas a hacerse con el triunfo. Al menos eso es lo que opina su coach Melendi.