El hijo de Julio Iglesias e Isabel Preysler está viviendo, sin duda, un momento agridulce. A la felicidad que siente por volver a España y al éxito que está teniendo con su participación en el musical Grease, se suma la difiícil situación que está atravesando su familia debido al delicado estado de salud en el que se encuentra Miguel Boyer, que continúa ingresado en la Clínica Ruber de Madrid desde que el pasado 28 de febrero sufriera una hemorragia cerebral. "Mi madre, al igual que mi hermana Ana, está triste, pero con muchas esperanzas. Está con él en el hospital todos los días esperando a que se recupere lo antes posible, que es lo más importante. Es un proceso muy lento, aunque cada día está mejor, pero todavía queda mucho".
Julio confirmó además que ha visitado al exministro de Economía y Hacienda en el hospital, pero que no es agradable la situación que están viviendo. "Con Miguel me llevo de maravilla, es un gran hombre y una persona muy especial en mi vida", confesó.
En la otra cara de la moneda está la alegría que siente porque por fin, este verano dará el 'sí, quiero' a la modelo belga Charisse Verhaert. "Falleció mi tía y no era el momento de organizarla. Jamás hemos tenido una crisis, llevamos seis años juntos y tenemos las ideas muy claras", aseguraba el artista en las páginas de la revista ¡HOLA! sobre las razones por las que había decidido posponer la boda. "Todavía no tenemos fecha exacta, pero será, sin duda, después del verano, fuera de España y por lo civil".
Además de lo bien que le van las cosas en el terreno personal, en lo profesional tampoco se puede quejar ya que está muy contento con su participación en el musical Grease. "Estoy feliz y muy contento de estar en España otra vez. Nunca había hecho un musical, es un trabajo diferente para mi porque hay que actuar, cantar y bailar todos los días, es un reto porque es la primera vez que lo hago pero estoy trabajando con gente maravillosa y muy profesional". "Eso sí, se me da mejor cantar que bailar", bromeó Julio. "Me encanta España y soy español, aunque a los nueve años me llevaron al extranjero. Antes no conocía a mucha gente, pero cada vez tengo más amigos aquí porque antes", añadió.