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La familia, los amigos y los seguidores más incondicionales de Michael Jackson no olvidarán fácilmente el espectáculo que se celebró anoche para rendir homenaje al fallecido 'rey del pop'. El estadio del Milenio de Cardiff (Gales) se vistió de gala para el concierto titulado "Michael Jackson Para Siempre", que contó con las actuaciones de numerosas figuras de la música y, como estaba previsto, subieron al escenario los hijos del artista, Prince Michael, de 14 años, Paris, de 13, y Blanket, de nueve, que protagonizaron los momentos más emotivos de la velada. Los tres se llevaron todos aplausos al presentar a la cantante Beyoncé, que no estuvo en Cardiff pero actuó a través de una conexión por vídeo. De hecho, Paris se refirió a la intérprete de éxitos como If I were a boy o Single ladies, como una mujer con gran "energía" y "talento" que lleva la "antorcha encendida por nuestro padre".
Los hijos del cantante quisieron rendir su particular homenaje a su padre luciendo estilismos casi idénticos a los que lució en algunos videoclips o conciertos. Así, mientras Prince Michael escogió una chaqueta de cuero y camiseta blanca, Paris prefirió lucir uno de los clásicos del 'rey del pop', la cazadora roja que llevó en el mítico vídeo de Thriller, y el pequeño Blanket repitió el 'look' que lució su hermano mayor hace unas semanas en una gala benéfica en Berlín.
Además de las actuaciones de Christina Aguilera, Leona Lewis, Ne-Yo, Cee Lo Green, Pixie Lott o Gladys Knight, por el escenario también pasaron los hermanos Jackson, LaToya, Tito, Marlon y Jackie, que se encargaron de organizar el evento e interpretaron la canción Blame it on the boogie, un tema que popularizaron con su grupo los Jackson 5. "He dejado la actuación musical durante unas dos décadas, pero no habrá otro momento mágico como este para recordar a Michael con sus fans", dijo emocionada LaToya a la prensa.
Los grandes ausentes fueron Jermaine, Randy y Janet Jackson, que según recogen diferentes medios británicos como el Daily Mail, pensaban que el espectáculo era "inapropiado e inoportuno" teniendo en cuenta que durante estos días se está celebrando el juicio por el fallecimiento de su hermano en el que el doctor Conrad Murray es el principal acusado. "Creemos que el homenaje más importante que podemos dar a nuestros hermanos en este momento es buscar la justicia en su nombre", declararon Jermaine y Randy en un comunicado.
El grupo Black Eyed Peas tenía previsto actuar pero se retiró hace una semana debido a unas circunstancias que calificó de "inevitables". En un principio, no consiguieron vender todas las entradas que esperaban, las más caras superaban los 270 euros. pero en las últimas horas se produjo un aumento sorprendente y al final consiguieron superar los 40.000 espectadores.
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