Metida de lleno y concentrada en la gira de promoción de su último trabajo Love? en Europa, Jennifer López ha conquistado en cada una de sus apariciones públicas. Su estilo y gusto en la elección de los modelos ha despertado la admiración de sus seguidores, que siguen con atención cada una de sus intervenciones televisivas. Sin embargo, cuando se quita el “traje” de estrella, Jennifer se pone ropa cómoda y ejerce su mejor papel: el de madre.
La familia al completo, sólo faltaba Marc Anthony, aprovechó un descanso en la apretada agenda de la intérprete para dar un paseo por el parque Monceau, de París. Junto a su madre Guadalupe, Jennifer llevó a sus mellizos Max y Emme a respirar aire fresco en este entorno natural. Mientras Max, que parece ser el más travieso, corría de un lado a otro con una pistola de agua con la que “amenazaba” a su hermana, esta se refugiaba en brazos de su madre. Sin soltar una caja con los accesorios de una muñeca, Emme iba cómodamente abrazada a Jennifer que no dejaba de hacerle carantoñas a la niña de sus ojos.
Los momentos más íntimos de tres generaciones que fueron captados por el objetivo de una cámara de fotos que llevaba una de sus acompañantes. A la cantante se le ilumina la cara cuando habla de sus pequeños, tanto que incluso en una reciente entrevista confesó que ellos le habían inspirado para su último disco, que arrasa en las pistas de baile.
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