Tras su separación del futbolista Ashley Cole, la cantante Cheryl Cole no atraviesa su mejor momento personal. Aunque parece que el deportista está dispuesto a hacer todo lo posible por reconquistarla, incluso se dice que ha grabado un montón de canciones románticas en un iPod que piensa regalarle, la artista estaría dispuesta a seguir adelante con los trámites de divorcio. De momento mantiene al respecto una actitud muy discreta, sin hacer comentarios acerca de su vida ni confirmar o desmentir las informaciones y rumores.
Apoyos para sobrellevar esta situación no le faltan. Su madre Joan no se separa de ella y sus amigos también le han ofrecido un hombro en el que refugiarse. En concreto, los miembros del grupo The Black Eyed Peas con los que compartió escenario en el concierto que dieron en el O2 Arena de Londres. Dado que su primer disco en solitario, 3 Words, fue producido por uno de sus componentes, Will. i. am, mantiene con este una especial relación que algunos auguran llegará más allá de la simple amistad.
La complicidad de ambos en escena, donde compartieron algunas notas, y la posterior charla en un local al que todos acudieron para celebrar el éxito del concierto, alimentan las especulaciones. Él ya habría confesado su debilidad por la ex componente de Girls Aloud y estaría intentando hacerse un hueco en su corazón. Por el momento, lo que parece claro es que se llevan a las mil maravillas y que él es uno de sus mejores confidentes. Sólo el tiempo dirá si finalmente el músico consigue conquistarla.