Madonna y Jesús Luz, pasión y diversión en alta mar
En compañía de su novio, sus cuatro hijos y unos amigos, la cantante celebró su 51 cumpleaños con una divertida fiesta en Portofino
Madonna vivió un cumpleaños muy especial. En plena gira Stiky and Sweet, la reina del pop hizo un alto en el camino para celebrar sus 51 años por todo lo alto. Rodeada de sus hijos, -Rocco, Lourdes, David Banda y Mercy-, su novio, el joven brasileño Jesús Luz, y sus amigos, Madonna irradiaba felicidad. A diferencia del pasado año, cuando todavía estaba casada con Guy Ritchie y miles de rumores de crisis acechaban a la pareja, la artista atraviesa este año un momento inmejorable tanto a nivel personal como profesional.
Pese a los 29 años que les separan, su romance va viento en popa
Los festejos comenzaron la noche del sábado cuando más de 80 mil personas la agasajaron en su concierto en Varsovia. La cantante, emocionada, dijo: "Es el cumpleaños más lindo que he recibido". Pero la verdadera fiesta no comenzó hasta la noche del domingo en el hotel Splendido de Portofino con una velada que reunió a amigos y en la que su hija Lourdes, de 12 años, le cantó el cumpleaños feliz. La cantante había reservado 16 habitaciones en un hotel de lujo e invitó, entre otras, a la modelo Naomi Campbell y a la actriz Gwyneth Paltrow.
Lourdes, de 12 años, le cantó a su madre el 'cumpleaños feliz'
Como en toda celebración de Madonna no faltó detalle. Fuegos artificiales, un chapuzón en alta mar y una fiesta en la casa de sus amigos Dolce & Gabbana en Portofino (Italia) fueron algunos de los ingredientes para su gran día.
Hubo tiempo para la diversión y también para el amor. Madonna y Jesús Luz protagonizaron románticas escenas a bordo del yate de la pareja de diseñadores. El joven brasileño, de 22 años, la agasajó con un espléndido ramo de flores. Abrazados y muy acaramelados, la pareja se fundió en un apasionado beso como muestra de lo enamorados que están y que su romance, que comenzó en diciembre, va viento en popa.
Se conocieron en diciembre y desde entonces se han vuelto inseparables
Escenas de amor también se vivieron entre Madonna y sus hijos. Rocco, de 9 años, le dio un espontáneo abrazo a su madre en la cubierta del yate, mientras que los más pequeños, David, de 3 años, y Mercy, de 4, lucían una camiseta que ponía 'Te quiero Madonna'.
El cariñoso abrazo de Madonna y su hijo Rocco
Pero el plato fuerte llegó horas más tarde cuando Madonna, vestida con el dorsal número 1 de la equipación de baloncesto, se lanzó al agua con ropa. Le siguió Jesús Luz y su grupo de amigos.que disfrutaron de un chapuzón en aguas del Mediterráneo.
Madonna se lanza al agua vestida con la equipación de baloncesto
Para culminar la celebración, sus amigos Dolce & Gabbana le organizaron una fantástica velada en su villa de Portofino a la que llamaron "Glitterball Chic". Madonna sorprendió en la fiesta con un discursó en el que declaró a los cuatro vientos su amor por Jesús Luz.
Jesús Luz con Mercy y Madonna junto a David, como una familia feliz