Una semana después de su boda en el Caribe, Mariah Carey y Nick Cannon ya pasean su amor por la Gran Manzana. Los recién casados acudieron a su primer acto público juntos, la gala de las 100 personas más influyentes de la revista Time, en la que no se separaron ni un minuto el uno del otro. Sus rostros son espejo de la felicidad que sienten, por lo que no dudó en posar en actitud muy cariñosa ante las cámaras. Mariah volvió a lucir su renovada y estilizada figura con un mini vestido plateado, a juego con los pequeños diamantes que cubrían el micrófono con el que interpretó algunos de los temas de su nuevo disco E=MC2.
"Me siento increíble al estar casado. Me duelen las mejillas de sonreír tanto, llevo haciéndolo días" aseguró Cannon. Mariah por su parte comentó: "Es reconfortante, algo que no había sentido nunca. Lo que es estar realmente enamorada, feliz con alguien que me entiende y no hace otra cosa que intentar hacerme feliz es maravilloso". La diva llevaba como complemento el precioso y carísimo (está valorado en más de un millón y medio de euros) anillo de boda que Cannon le regaló: una joya con diamantes en color rosa, su color favorito. Este compromiso profesional ha puesto el punto y final a su luna de miel en el Caribe, aunque quién sabe si volverán a hacer alguna escapada en los próximos días (la artista ha cancelado el concierto que tenía previsto para la semana que viene en Dubai).
La boda de Mariah Carey fue una auténtica sorpresa no sólo porque se desconocían sus planes, sino porque tampoco había transcendido su noviazgo. Nick y ella se conocieron hace poco más de un mes en el rodaje de uno de los videoclips de la artista, Bye bye, en el que él participaba. Lo suyo fue un amor a primera vista tal y como confesaron a la revista People después de darse el "sí quiero". "Sentimos que somos almas gemelas" aseguró ella entonces.