Aunque no es la primera vez que Lili Grace posa frente a las cámaras, sí es la primera vez que lo hace sola y de manera profesional. La responsable de convertirla en el nuevo ‘icono brit’ es la firma The Braid Bar, un espacio ubicado en el prestigioso centro comercial Selfridges que se encarga de elaborar complejas trenzas solo aptas para los cabellos más exigentes.