El director creativo de Balmain es de sobra conocido por su carácter revolucionario y por la expectación que genera cada una de sus colecciones. Además, es íntimo amigo de numerosas modelos de Victoria’s Secret y de otras personalidades que apoyan sus creaciones de manera incondicional. Fue precisamente quien firmó el impresionante vestido de Irina Shayk con cremallera trasera en el pasado Festival de Cine de Cannes.