La semana que viene, del 6 al 8 de julio –te mantendremos puntualmente informados de las principales presentaciones-, tendrá lugar una nueva edición de la Alta Costura o, lo que es lo mismo, los desfiles en los que ingenio parece no tener límites y el lujo es prácticamente un requisito imprescindible. Un mágico momento que encierra horas de preparativos, un minucioso trabajo artesanal y mucha creatividad. ¿Quieres conocer este lado casi desconocido de la ‘Haute Couture’?
Te abrimos las puertas de los preparativos de las creaciones que la casa Christian Dior presentó durante la pasada edición de Alta Costura, destinadas a vestir el lujo y la elegancia de esta temporada de primavera-verano 2009 (así fue el desfile). Primero, viajamos a los talleres parisinos de la firma, en donde los patrones, telas y bustos se mezclan para que las costureras comiencen a dar vida a la nueva colección ideada por el siempre sorprendente diseñador John Galliano.
Una vez que se tienen los patrones y que se han montado los vestidos sobre bustos, llega el momento del ‘fitting’, es decir, las pruebas de vestuario sobre las modelos. Casi cosidos sobre el cuerpo cada creación debe estar perfecta. Después, los nervios se trasladarán al mismo día del desfile cuando, en ‘backstage’ o 'entre bambalinas', las modelos son las que deben alcanzar esa perfección requerida para hacer de cada presentación un momento inolvidable.
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