La obesidad canina es un problema que cada vez va a más. Según los estudios realizados en 2015 por PAW (PDSA Bienestar Animal), casi la mitad de los dueños de perros está preocupado por la amenaza creciente que supone la obesidad para sus mascotas, especialmente los perros. Lo alarmante es que los veterinarios están de acuerdo con este terrible pronóstico.