Las tendencias para el próximo otoño-invierno siguen avanzando imparables hacia el armario masculino. En esta ocasión, son los bolsos los que, como cada temporada, ganan un hueco destacado entre los complementos clave de cada día: desde maletines y portafolios, hasta bolsos de mano con agarraderas o cinchas, mochilas o riñoneras, todos tienen cabida, y lo que es más, se han convertido en pieza clave de los desfiles de muchas firmas a la hora de presentar sus colecciones sobre la pasarela. Para completar el look: zapatos de sabor vintage, de corte Oxford, como el brogue tradicional, mocasines de charol adaptados al invierno, o flexibles slippers. ¿Quieres echar un vistazo a lo que más se lleva?
Bolsones de mano y maletines. De líneas redondeadas, con asas, correas, para llevar bajo el brazo o colgados a la espalda, los bolsos de mano se han ganado un hueco más que respetable entre las colecciones de complementos masculinos. Para este otoño-invierno, los diseñadores proponen piezas elaboradas en piel flexible, como es el caso de Armani, Jill Sander o Vuitton, o mezclando texturas, como Gucci o Lauterbach. Los maletines, más angulosos y sofisticados, son perfectos para el día al dia laboral: por su tamaño, capacidad y múltiples bolsillos, las piezas recurren al formato vintage en piel envejecida (Dunhill, Iceberg), al clásico portafolio de toda la vida, con o sin correa (Canalli, Dior) o adquieren dimensiones XL (Vuitton, Versace).
Nuestros favoritos: las apuestas por el total look, combinando el traje con el bolso, como los estilismos monocolor de Z Zegna o los estampados de Alexander McQueen, las mochilas-bolso, como las de Bottega Venetta o Dunhill, y las piezas multiusos, con varias posiciones, de Kenzo.
En lo que respecta a los zapatos, y al margen de la destacada tendencia militar que parece avecinarse en los próximo meses en forma de botas altas, decoradas con hebillas y gruesos cordones de vueltas, el botín de piel al tobillo parece convertirse en la alternativa más solida (y confortable) para los menos atrevidos. Los aires retro no abandonan el armario masculino tampoco al hablar de calzado: brogues, mocasines, náuticos, slippers... en cuero y piel, para resistir a las lluvias y fríos, sin renunciar al chic del zapato de entretiempo.