No están en el mercado, muchos puede que tarden en ver la luz alguna que otra década más, y otros ni siquiera abandonarán las salas de diseño de los ingenieros expertos en automoción. Son los supercoches, prototipos que avanzan el futuro, rozando los límites de la ciencia ficción: coches que se adhieren a las paredes buscando nuevos medios de descongestión en las grandes ciudades, microcoches que apenas ocupan espacio, coches eco-friendly que no ejercen apenas impacto sobre el medioambiente, estructuras inspiradas en el exoesqueleto (es decir, el esqueleto externo) de los insectos, coches anfibio, coches que surcan los cielos amarrados a un parapente ultraflexible…
El viejo Delorean que viajaba hacia delante y hacia atrás en el tiempo se convierte en una autentica pieza de museo al lado de algunos de estos modelos. ¿Quieres ver lo que nos espera? No te pierdas la galería de imágenes.