A la espera de su incorporación en el FC Barcelona, Iván Rakitic ha elegido las paradisíacas playas de Ibiza, como muchos otros rostros conocidos, para disfrutar de las vacaciones estivales en compañía de su mujer, Raquel Mauri y su hija Althea.
El jugador croata y sus chicas disfrutaron de una comida en una terraza a pie de playa en una de las zonas de moda de la isla, después se dieron un baño en familia y se sentaron en la arena para que la pequeña Althea pudiera jugar con su cubo y su rastrillo, momentos en los que el futbolista se mostró como todo un padrazo con la pequeña.
El centrocampista croata es uno de los nuevos fichajes de las filas del club azulgrana para la nueva temporada, luciendo el número 4 que hasta este momento llevaba Cesc Fábregas, recientemente traspasado al Chelsea. Hasta ahora, Iván Rakitic jugaba en el Sevilla Fútbol Club y vivía con su familia en la ciudad hispalense, de donde es natural su esposa y en donde se casaron el año pasado. A los pocos meses nació su primera hija, el broche de oro a su bonita historia de amor.
Iván Rakitic ha tenido que hacer un gran esfuerzo para dejar el club sevillano, ya que lleva vinculado a él desde el 2011. Después de estas merecidas vacaciones, la familia empezará una nueva vida en Barcelona, donde el jugador ha firmado un contrato que le vincula las cinco próximas temporadas.
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