La 'mini' cantera del Real Madrid se suma a la fiesta por la décima
Iker y Sergio Ramos llevaron a sus pequeños a la celebración en el Bernabéu
Miles de personas, miles de gritos, miles de vítores… La décima Copa de Europa bien vale estar un par de noches en vela siempre que se empleen para celebrar junto a la afición un triunfo así. Los jugadores del Real Madrid ya recibieron en Lisboa y en la Cibeles todo el cariño de sus seguidores, pero faltaba una fiesta más. Una en la que el Bernabéu al unísono gritara “Campeones”. Después de pasar por la sede de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento, un paseíllo por las calles de la capital que fue seguido de cerca por una riada humana que flanqueó el paso del autobús blanco, los jugadores llegaron al estadio.
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“Buenas noches Bernabéu. Gracias por la espera pero ha merecido la pena después de doce años. Es por vosotros y por todos los madridistas del mundo. Espero que la disfrutéis y después de hoy a pensar en la undécima” dijo el capitán Iker Casillas, que no se separó del gran protagonista de la final, Sergio Ramos.
"Me siento un privilegiado de formar parte del mejor equipo del mundo. Espero estar muchos años y poder retirarme en este club. Desde el primer día noté el cariño de la gente. Es un sueño para mí haber podido levantar esta 'orejona' y eso es gracias a todos los jugadores y a todos vosotros. Hoy le quiero dedicar esta copa a todo el madridismo pero sobre todo a Pitina, mujer del presidente, que desde arriba nos ha dado mucha fuerza” declaró Ramos en referencia a la mujer de Florentino Pérez, fallecida hace dos años.
Sergio e Iker fueron sin duda los más aclamados de la velada y los encargados de, junto al resto de compañeros, alzar una vez más la preciada copa. “Ganamos el título más importante de la historia del club. Hala Madrid” gritó Cristiano Ronaldo. En medio de una lluvia de confeti, con la bandera del club anudada a la cintura, los deportistas saltaron al césped para recibir el último baño de masas de la temporada. Un fin de fiesta que tuvo algunos protagonistas de excepción, los hijos de los futbolistas.
Xabi Alonso, Di María, Arbeloa y Gareth Bale disfrutaron de la ilusión y de este momento histórico con sus pequeños. Lo mismo hizo Iker Casillas, que cogió en brazos a Martín y parecía decirle: “Mira hijo, así es el cariño de una afición”.
El bebé, con una camiseta con su nombre, observaba bien despierto lo que había alrededor, una combinación de gritos y luces que asustaron al niño que comenzó a hacer pucheros... claro, sólo tiene cinco meses y aún no está acostumbrado. Pero allí estaban los compañeros de su padre para hacerle carantoñas y es que, el hijo del capitán, es ya uno más de la plantilla blanca.
También en las gradas, aún es muy chiquitín para saltar al terreno de juego, estaba Sergio Ramos Rubio, hijo de Pilar Rubio y Sergio Ramos. Bien envuelto en una mantita y en brazos de su madre, que llevaba su mirada del futbolista, al que observaba con orgullo, y al niño, al que dirigía toda su ternura. Pilar se sentó en laos bancos también junto a Sara Carbonero, que dentro de poco viajará a Brasil para retomar su trabajo al frente de las emisiones del Mundial de fútbol. ¿Se llevará también a Martín?